El adi¨®s de Eduardo Westerdahl

Nos ha dejado un vac¨ªo Eduardo Westerdahl, el pionero en la difusi¨®n y conocimiento, en las artes pl¨¢sticas de nuestra contemporaneidad. A sus cerca de 80 a?os, y no solamente por su actividad en Tenerife sino a otros niveles internacionales, desde el a?o 1932, en que diera vida a la Gaceta del arte y realizara la primera exposici¨®n del surrealismo en su propia isla, alentando otros acontecimientos, como la exposici¨®n internacional de Escultura en la Calle con el Colegio de Arquitectos y de cuya muestra la ciudad fue beneficiaria de treinta y tantas esculturas.Para los que luchamos por concienciar a nuestra sociedad del valor de nuestra cultura contempor¨¢nea, la que debemos legar a futuras generaciones, animando y protegiendo a estos j¨®venes creadores, los que han de enriquecer con sus obras los museos contempor¨¢neos tan pobres hoy, Eduardo Westerdahl ha sido un ejemplo en esta difusi¨®n, defensa y desarrollo de lo contempor¨¢neo en su m¨¢s amplio conocimiento, tan rico y diverso de prop¨®sitos para la comunicaci¨®n en el mundo de las artes pl¨¢sticas en funci¨®n de la cultura para todos y de todos.

Un acto humano, igual para todos

El primero de enero de este a?o, antes de ser operado, me escribi¨® una entra?able carta, "Yo me estoy preparando humildemente para este suceso, pero no quiero hablar de ¨¦l", premonitoria frase con la que nos estaba diciendo "adi¨®s", ¨¦l, tan agarrado a la vida.

Como los muertos no quieren desaparecer, que esa medalla de oro de las Artes, hace tres a?os solicitada para ¨¦l, le llegue como justificaci¨®n y agradecimiento de quienes no le han de olvidar.