El Fondo Monetario Internacional estudia en Washington el incremento en un 50% de sus recursos

Presionados por la cr¨ªtica situaci¨®n de algunos pa¨ªses en desarrollo y por las dificultades de algunos de sus miembros a la hora de pagar sus compromisos de deuda externa contra¨ªda, los ministros de Finanzas de las naciones representadas en el comit¨¦ interino del Fondo Monetario Internacional (FMI) han iniciado en la ciudad Washington cuatro d¨ªas de discusiones con el objetivo prioritario de incrementar los recursos financieros de la instituci¨®n mundial y su capacidad t¨¦cnica para asistir a los pa¨ªses en la resoluci¨®n de sus desequilibrios exteriores.

En el curso de esta reuni¨®n, adelantada en m¨¢s de dos meses con el prop¨®sito de acelerar la entrada en vigor de los nuevos mecanismos de asistencia a los pa¨ªses en dificultades, est¨¢ previsto que se autorice el incremento en un 50% de los recursos de ayuda crediticia del FMI, hasta totalizar los 98.700 millones de d¨®lares. Paul Volcker, presidente del Sistema Federal de la Reserva norteamericana, ha declarado que un fracaso de este programa afectar¨ªa seriamente a la d¨¦bil estabilidad del sistema financiero mundial.Asimismo, los veinte ministros de Finanzas de los pa¨ªses que componen el comit¨¦ interino del FMI (encargado de la elaboraci¨®n de pol¨ªtica del organismo) est¨¢ previsto que analice la situaci¨®n econ¨®mica mundial y sus perspectivas inmediatas de relanzamiento. Un informe confidencial presentado por el director gerente del FMI, Jacques de Larosi?re, a la atenci¨®n del comit¨¦ contempla, por vez primera en los ¨²ltimos cinco a?os, la posibilidad de recomendar a cada miembro la adopci¨®n de pol¨ªticas de est¨ªmulo que permitan una r¨¢pida salida de la crisis econ¨®mica global.

Reforma del n¨²mero de votos

El incremento de las cuotas del FMI, junto al espinoso problema de una paralela reforma del n¨²mero de votos de los 144 pa¨ªses miembros del FMI, ser¨¢, sin embargo, el tema central de la reuni¨®n, pese a existir un acuerdo previo de los pa¨ªses desarrollados (el llamado grupo de los diez) para proceder a este incremento a partir de la asamblea anual del FMI y el Banco Mundial el pr¨®ximo septiembre. El incremento sustantivo de las cuotas que los 144 pa¨ªses miembros pagan al FMI result¨® ser una cuesti¨®n evidente y urgente en el curso de la pasada asamblea anual del FMI, celebrada a primeros de septiembre en Toronto (Canad¨¢). La inesperada crisis de liquidez del M¨¦xico y la suspensi¨®n de pagos de intereses de sus deudas exteriores por parte de Argentina, Brasil y otros pa¨ªses del Tercer Mundo, demostr¨® que los actuales recursos del FMI son in suficientes para asistir a estos pa¨ªses a reestructurar sus deudas con la banca privada a un mayor plazo posible.El secretario norteamericano del Tesoro, Donald Regan, insiti¨® ayer, en el curso de una conferencia de prensa, en el compromiso de su pa¨ªs de apoyar el incremento de las cuotas en un 50%, pese a que el Legislativo est adounidense que debe aprobar una ley que permita al Ejecutivo la entrega de los fondos, no ve con buenos ojos esta mayor contribuci¨®n de Washington al organismo mundial. Regan mostr¨® tambi¨¦n su apoyo al plan aprobado en Par¨ªs, en el curso de una reuni¨®n del llamado grupo de los diez, de incrementar de 7.100 millones a 19.000 millones de d¨®lares el fondo de emergencia del FMI con el que asistir a los pa¨ªses con serias dificultades para afrontar sus pagos de deuda exterior.

Otra cuesti¨®n que se presenta pol¨¦mica es la pretensi¨®n norteamericana de limitar, del 450% actual al 300% de la cuota respectiva, la capacidad de un pa¨ªs miembro del FMI de solicitar anticipos a cuenta del organismo mundial. Esta reducci¨®n, de ampliarse los recursos del FMI como est¨¢ previsto, dejar¨¢ la cantidad que cada pa¨ªs puede solicitar en cifra muy parecida a la anterior. Washington desea as¨ª disminuir los riesgos de estimular artificialmente la inflaci¨®n mundial.

En el frente de la pol¨ªtica econ¨®mica, el aspecto m¨¢s novedoso de esta sesi¨®n de primavera, es el informe sobre coyuntura mundial que, en claro constraste con informes previos, ofrece la novedosa tesis de que el a?o 1983 puede ofrecer la salida del t¨²nel. El FMI viene a decir que el cambio de pol¨ªticas puede ser ahora una posibilidad cierta y que si todav¨ªa los objetivos antiinflacionistas no deben ser olvidados, el problema del paro y del crecimiento son ahora prioritarios. El cambio de filosof¨ªa en el FMI respecto a las pol¨ªticas econ¨®micas pueda deberse a las presiones europeas para que Estados Unidos ejerza ahora de locomotora de la econom¨ªa mundial en unos momentos en que el Tercer Mundo entra en un per¨ªodo de incertidumbre y por tanto, es incapaz de ejercer de estimulador de las econom¨ªas occidentales.