Arafat arrastra a los palestinos por el camino de la moderaci¨®n
El futuro de la OLP, el camino a seguir para crear un Estado palestino, y su coexistencia con Israel se deciden esta semana en Argel
Los 315 delegados de la m¨¢xima instancia de la OLP, el Consejo Nacional Palestino (CNP, Parlamento en el exilio), pertenecientes a todos los grupos pol¨ªticos y asociaciones que componen la central palestina, debatir¨¢n a lo largo de la pr¨®xima semana en Argel la oportunidad de seguir adelante con la estrategia moderada de su l¨ªder, Yasir Arafat.Abu Amar, nombre de guerra de Arafat, aun repitiendo que los palestinos potenciar¨¢n su actividad militar contra Israel, ha emprendido en realidad una pol¨ªtica flexible que multiplica los contactos con el rey Hussein de Jordania para llegar a un acuerdo sobre la formaci¨®n de una delegaci¨®n conjunta jordano-palestina que negocie con Estados Unidos, e indirectamente con Israel, en torno al plan de paz del presidente norteamericano Ronald Reagan.
Los responsables palestinos han evitado rechazar de lleno el plan de paz estadounidense, que, aun no recogiendo su reivindicaci¨®n fundamental, consistente en fundar un Estado independiente en Cisjordania y Gaza, preconiza la creaci¨®n de una entidad -confederada con Jordania- en esos territorios ocupados y la interrupci¨®n de la construcci¨®n de nuevos asentamientos de poblaci¨®n israel¨ª.
Los grupos mas radicales de la OLP discrepan con esta opci¨®n conciliadora del m¨¢ximo dirigente palestino y, sin llegar a poner su autoridad en tela de juicio se esforzar¨¢n probablemente en Argel por recortar su mandato.
Arafat, adem¨¢s de su facultad de persuasi¨®n, cuenta, para imponer sus tesis, con un ampl¨ªo respaldo en el seno de Al Fatah, el principal grupo de la OLP, que le asegurar¨¢ una mayor¨ªa holgada en el CNP.
El mandato de Hussein
Aunque con matices, casi todas las tendencias representativas palestinas aceptan ya el principio de la confederaci¨®n de Cisjordania con Jordania. Sus discrepancias giran en torno al mandato del que dispondr¨ªa el rey Hussein para negociar en nombre de la OLP con una Administraci¨®n norteamericana que se niega a dialogar directamente con la central palestina mientras ¨¦sta no reconozca expl¨ªcitamente a Israel.
Arafat est¨¢ dispuesto a otorgar al monarca hachemita un amplio margen de confianza en eventuales conversaciones, con tal de no quedar al margen de un esbozo de negociaci¨®n mientras el ala marxista de la OLP se resiste a renunciar a dieciocho a?os de lucha armada para poner la suerte del pueblo palestino en manos de un reyezuelo que aplast¨® militarmente a los fedayin en septiembre de 1970.
Otro punto del debate consiste en determinar si las personalidades palestinas que integrar¨ªan la delegaci¨®n com¨²n deben ser designadas por sus ¨®rganos directivos o bien ser¨¢n nacionalistas independientes, como lo exige Washington, para evitar as¨ª dar la impresi¨®n de discutir de forma encubierta con los hombres de Arafat.
El 1 de marzo, cuando conozca las resoluciones adoptadas en Argel, Hussein tiene previsto anunciar si acepta participar en conversaciones de paz con EE UU.
Sobre el contenido de la negociaci¨®n, la direcci¨®n de la OLP busca, seg¨²n declar¨® a EL PAIS en Amman el alcalde destituido de la ciudad cisjordana de Jaljul, Mohamed Milheim, "una f¨®rmula de compromiso entre el plan de paz ¨¢rabe acordado en la cumbre de Fez y el plan Reagan" que permita satisfacer, aunque s¨®lo sea simb¨®licamente, la principal reivindicaci¨®n palestina: la creaci¨®n de un Estado independiente que despu¨¦s se confedere.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.