Fuerte pol¨¦mica en Austria en torno a la conmemoraci¨®n del centenario de Wagner
La celebraci¨®n, el domingo pasado, del centenario de la muerte de Richard Wagner ha desatado en Viena una fuerte pol¨¦mica y duros enfrentamientos verbales entre los partidarios y adversarios del compositor. Durante una lectura matinal en la ¨®pera de Viena del texto de Los maestros cantores de Nurenberg, Marcel Prawy, autor de una biograf¨ªa y ferviente admirador del genio de Bayreuth, critic¨® duramente los ataques a Wagner aparecidos en la Prensa alemana y en la austriaca en los ¨²ltimos d¨ªas y rompi¨® ostentosamente la focotopia de un art¨ªculo del conocido cr¨ªtico literario vien¨¦s Hans Weigel.
El texto de Weigel, publicado recientemente en el diario muniqu¨¦s Merkur, defin¨ªa a Wagner como "el sarampi¨®n de los aficionados a la ¨®pera", "fase que hay que pasar en la infancia, pero que en la madurez es insoportable". Seg¨²n Weigel, que no escatimaba improperios contra el compositor, los Maestros cantores es una obra a¨²n pasable, pero Parsifal es un somn¨ªfero insufrible.
El gesto de Prawy ante una audiencia que llenaba la sala, y en la que se encontraban, adem¨¢s del canciller austriaco, Bruno Kreisky, y el director de la Opera, Loren Maazel, muchos profesionales de la ¨®pera, provoc¨® reacciones encontradas, que demuestran la gran carga emocional que a¨²n arrastra la pol¨¦mica en torno a Wagner Mientras la mayor¨ªa aplaud¨ªa entusiasmada y se escuchaban gritos de bravo, otros espectadores guardaban silencio, y alguno incluso opt¨® por dejar la sala. El hecho de que tanto Weigel como Marcel Prawy sean jud¨ªos no ha hecho sino enconar el conflicto.
"Ritual del odio"
El antisemitismo de Richard Wagner, autor de un panfleto titulado Los jud¨ªos y la m¨²sica, y ya utilizado como bandera de la lucha aria contra el juda¨ªsmo por la propaganda del Tercer Reich, es uno de los factores extramusicales m¨¢s discutidos de su obra. As¨ª, el diario vien¨¦s Die Presse ha calificado el suceso del domingo como "la imitaci¨®n de una pr¨¢ctica nacionalsocialista de un jud¨ªo contra otro", y acusa a Prawy de realizar ante el p¨²blico un ritual del odio.El diario critica duramente al director de la Opera, Loren Maazel, asimismo jud¨ªo, que no intervino para evitar o condenar la destrucci¨®n del texto de Weigel, a pesar de su notoria costumbre de tachar de actitudes antisemitas todas las cr¨ªticas que recibe en su gesti¨®n como dirigente de una de las principales ¨®peras del mundo.
Respecto al incidente, Weigel ha declarado a la radio austr¨ªaca que "el haber estado presente de alguna forma en la celebraci¨®n del centenario de la muerte de Wagner es un broche de oro para su carrera como enemigo de la obra wagneriana". Seg¨²n Weigel, la obra de Wagner "destila el car¨¢cter despreciable de su autor".
Marcel Prawy, por su parte, ha pedido disculpas por su arrebato al romper el texto del cr¨ªtico antiwagneriano, pero insiste en condenar los ataques que, en el centenario de su muerte, se han publicado contra Wagner, "un hombre que con su magistral obra ha legado tanta belleza y arte a todos los pueblos, pa¨ªses y razas".
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