Las prostitutas italianas piden, en su primer congreso nacional, pagar impuestos
Son casi un mill¨®n entre las que lo hacen como profesi¨®n y las que ejercen s¨®lo para redondear el sueldo. Ganan en un solo d¨ªa m¨¢s que un obrero en todo el mes. No pagan impuestos. Y son la ¨²nica categor¨ªa de Italia a la que "no se le permite pagar" contribuci¨®n. Y los ¨²nicos trabajadores que han protestado en p¨²blico por esta exclusi¨®n. Porque ellas desean pagar. Lo han pedido la semana pasada en el primer congreso nacional convocado por la categor¨ªa.
No es un acertijo ni una broma. Y es f¨¢cil adivinar que se trata del llamado trabajo m¨¢s antiguo del mundo: de la prostituci¨®n.Todo empez¨® el 13 de octubre de 1982, cuando un pu?ado de esas mujeres, que prefieren llamarse luci¨¦rnagas, como lo han hecho en el congreso nacional que acaba de celebrarse, organizaron el primer comit¨¦ de lucha. Eran s¨®lo cinco: tres prostitutas y dos ajenas a la profesi¨®n. Las fuerzas pol¨ªticas m¨¢s progresistas, con los radicales a la cabeza, pero tambi¨¦n socialistas y comunistas, las apoyaron. Los radicales llegaron a presentar un nuevo proyecto de ley sobre prostituci¨®n al Parlamento. Y la iniciativa ha culminado en el primer congreso nacional, que se ha celebrado en la ciudad de Pordenone, en la regi¨®n de Venecia.
Un congreso en el que se han codeado, en las butacas del p¨²blico y en la mesa de los oradores, prostitutas, diputados, soci¨®logos y hasta sacerdotes. Y no ha faltado hasta una representaci¨®n del Gobierno. Les habl¨® el ministro de la Protecci¨®n Civil, Loris Fortuna, ex vicepresidente del Parlamento y famoso por haber sido el padre de la ley del divorcio primero y del aborto m¨¢s tarde en este pa¨ªs. ?nico inconveniente del congreso fue la preocupaci¨®n de los periodistas para no meter la pata: "Por favor, ?es usted diputado?" "No, a¨²n no, soy por ahora una simple prostituta..." O al rev¨¦s: "Usted es...", "no, yo soy diputado".
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