La CEE pone a punto un documento para acelerar la union pol¨ªtica de Europa

ENVIADO ESPECIALLos diez pa¨ªses de la CEE (Comunidad Econ¨®mica Europea) pueden firmar en la cumbre de junio, en Stuagart, la tan esperada acta europea sobre la uni¨®n pol¨ªtica, si bien en forma m¨¢s diluida que el plan de 1981 de Italia y la Rep¨²blica Federal de Alemania. Se trata de relanzar din¨¢micamente el proceso de integraci¨®n europea. Los ministros de Asuntos Exteriores de los diez se reunieron ayer en Bonn, en el marco de la cooperaci¨®n pol¨ªtica en la CEE para tratar este tema.

Si bien no con unanimidad, los diez se mostraron moderadamente optimistas ante la posibilidad de concluir en la CSCE (Conferencia sobre Seguridad y Cooperaci¨®n en Europa), en Madrid, con un documento final equilibrado que abriera la puerta a un "mandato preciso sobre una conferencia de desarme en Europa".

En la peculiar relaci¨®n pol¨ªtica entre la CEE y Espa?a no le correspond¨ªa a ¨¦sta estar presente en esta reuni¨®n de cooperaci¨®n pol¨ªtica europea, de la que ser¨¢ informada. Es en este marco informal en el que los diez coordinan su pol¨ªtica exterior, en aquellas cuestiones en las que se pueden poner de acuerdo. La cuesti¨®n del acta europea, en este semestre en el que la RFA ejerce la presidencia de la Comunidad, domin¨® las discusiones de la tarde. El ministro franc¨¦s Claude Cheysson habl¨® de una "solemne declaraci¨®n europea", que podr¨ªan firmar los diez al nivel m¨¢s elevado, es decir, en la cumbre europea de junio, ya que la presidencia alemana insiste en concluirla antes de que expire su mandato.

El texto del acta prev¨¦ en principio una mayor colaboraci¨®n en todos los campos, incluidos los de seguridad, las legislaciones nacionales, la econom¨ªa y las finanzas, la cultura y la pol¨ªtica exterior. Los mayores problemas que subsisten en el plan Genscher-Colombo presentado en 1981, y que ahora parece haberse remozado, siguen siendo el principio del voto por mayor¨ªa -y no por unanimidad- en los Consejos de Ministros que no logren llegar a un consenso.

Las mayores reservas ante estos planes provienen de Dinamarca y el Reino Unido -que quieren defender con el derecho de veto sus intereses pesqueros y sus protestas sobre la contribuci¨®n al presupuesto comunitario-, y Grecia, que quiere preservar sus intereses de car¨¢cter general (y especial respecto a la colaboraci¨®n con Turqu¨ªa).

Los diez abrieron su debate de ayer con el tema de las relaciones Este-Oeste, dando muestras de optimismo -no compartido por B¨¦lgica- de cara a un resultado sustancial en la Conferencia de Madrid, donde mantienen una pol¨ªtica unitaria. Los comunitarios valoraron como positiva la Declaraci¨®n de Praga del Pacto de Varsovia.

Las fuentes comunitarias han observado un progreso en dos temas precisos: el libre acceso a las embajadas extranjeras y a las suscripciones a peri¨®dicos extranjeros, al tiempo que mostraron su inter¨¦s sobre un mandato preciso para una conferencia de desarme y medidas de confianza en Europa "que interesa al Este".

Sobre la cuesti¨®n de Oriente Pr¨®ximo no habr¨¢ una nueva iniciativa europea. Los diez siguen apoyando el plan Reagan y el plan de Fez, apoyando una autodeterminaci¨®n palestina. Comentando el Consejo Nacional Palestino que se reuni¨® en Argel, Cheysson se felicit¨® de "la unidad del movimiento palestino sin que su l¨ªder, Yasir Arafat, se haya tenido que atar las manos de cara al futuro".