La conferencia de Prensa del jefe del Gobierno

Es curioso lo que pasa con los cien d¨ªas del Gobierno. Ayer, el presidente del Gobierno, Felipe Gonz¨¢lez, al abrir su conferencia de Prensa, recordaba que en ning¨²n pa¨ªs del mundo hay costumbre de hacer balance de gobierno en ese corto per¨ªodo. Pero lo cierto es que, con el entusiasmo que nos caracteriza, las cuentas de los cien d¨ªas parecen ya una obligaci¨®n, a la que el mismo presidente del Gobierno se sujeta, y tambi¨¦n una ocasi¨®n que su propaganda de partido aprovecha.El se?or Gonz¨¢lez estuvo, como de costumbre, grato de tono, espont¨¢neo de maneras, modesto de apreciaciones, pero no dio ninguna noticia. Lo ¨²nico que nos pareci¨® novedoso, y a ello ce?iremos nuestro comentario, es la afirmaci¨®n categ¨®rica de que Espa?a no quiere hacer nada par aumentar la tensi¨®n entre el Este y el Oeste, ni para debilitar o hacer m¨¢s fr¨¢gil las posiciones de Occidente y, como no se conoce el plazo en que va a cesar lo delicado de la tensi¨®n internacional, no habr¨¢ por ahora refer¨¦ndum sobre la Alianza Atl¨¢ntica.

Nos parece muy bien y muy puesto en raz¨®n. Unicamente consideramos que esto pod¨ªa haberse previsto antes, y que, como hemos sostenido siempre en esta columna, la cuesti¨®n del refer¨¦ndum sobre la OTAN fue un error de partido y una fuente de complicaciones y debilidades para el Gobierno.

Si no es bueno para la econom¨ªa espa?ola que nacionalicemos, ?porqu¨¦ hemos de nacionalizar?, pregunt¨®. Pero como el sector p¨²blico era ya extenso y despu¨¦s de lo de Rumasa lo es m¨¢s, el se?or Gonz¨¢lez asegur¨® que va a intentar buscar empresarios que lo sean para gestionar el sector p¨²blico. Lo que pasa es que la dificultad de realizar una buena gesti¨®n en ese ¨¢mbito no se resuelve s¨®lo con la capacidad de las personas que se pongan a su frente. El problema es que el sector p¨²blico aumenta, y cuanto m¨¢s reducido ese sector, m¨¢s agil.

El presidente del Gobierno ha querido salvar el compromiso de conceder o no conceder inn¨²meras entrevistas con ocasi¨®n de los cien d¨ªas y ha dedicado un par de horas a mostrar que es el de siempre- y a explicar largamente que no hay novedad. Ha querido tranquilizarnos a todos sobre la salud del sistema financiero y hasta de la peseta y ha remitido discretamente la pr¨®xima explicaci¨®n de conjunto al debate sobre presupuestos, que, de paso, ha venido a indicar que todos contribuimos a engordar, reconociendo al tiempo que tambi¨¦n los que hoy est¨¢n en el Gobierno lo hab¨ªan hecho cuando se hallaban en la oposici¨®n.

El presupuesto ser¨¢, en efecto, el pr¨®ximo debate, y las municipales, la pr¨®xima confrontaci¨®n. A ella empiezan a supeditarse ya muchas, cosas. Hay decisiones -como por ejemplo el mismo contencioso sobre la valoraci¨®n de transf¨¦rencias a la Generalitat- que parece que van a quedar para despu¨¦s.