Cien d¨ªas del poder socialista en Espa?a

?Desencanto entre nuestros electores? Francamente no lo creo, o acaso s¨®lo en una minor¨ªa que cre¨ªa el 28 de octubre votar por la Virgen de F¨¢tima y no por un partido que tendr¨ªa un margen de maniobra reducido. No hemos prometido milagros durante nuestra campa?a electoral. Se nos reconoce ahora un m¨¦rito: el de gobernar con decisi¨®n y haber restaurado la autoridad del poder civil."Estas declaraciones de un colaborador de Felipe Gonz¨¢lez, el presidente del Gobierno, resumen el estado de esp¨ªritu de los dirigentes del PSOE, que acaba de franquear los primeros cien d¨ªas de gobierno. ( ... )

Al afirmar que el PSOE, despu¨¦s de la moderaci¨®n fingida de su campa?a electoral, se hab¨ªa dejado vencer por los demonios marxistas, la Prensa conservadora no ha convencido a nadie. Sobre todo, teniendo en cuenta que los medios financieros y los bancos han sido los primeros en comprender que un holding dirigido sin tener en cuenta las reglas m¨¢s elementales de la gesti¨®n econ¨®mica, que no pagaba sus impuestos y que falsificaba sus balances, deb¨ªa ser expropiado antes de la cat¨¢strofe. ( ... ) La pol¨ªtica de austeridad comienza a provocar protestas en medios obreros. Cien mil personas se manifestaron en Gij¨®n en enero, 30.000 personas en Sagunto, para denunciar el cierre de un alto horno. ( ... )Esta pol¨ªtica ser¨ªa, sin duda, m¨¢s f¨¢cil de aceptar por aquellos a quienes les afecta, si estuviese acompa?ada de algunos gestos de car¨¢cter social. ( ... ) Pese a que el programa electoral del PSOE preve¨ªa el mantenimiento del poder de compra de los trabajadores, estos ¨²ltimos han debido aceptar una tabla de aumentos salariales que es inferior a la inflaci¨®n prevista. (...)

Hay que amortiguar la hostilidad de los centros tradicionales de poder, afirmaba hace poco el vicepresidente del Gobierno, Alfonso Guerra. La f¨®rmula ilustra la estrategia de los socialistas frente a las fuerzas armadas, al empresariado y, m¨¢s generalmente, a los poderes f¨¢cticos, como se dice en Madrid, que ha permitido que la instalaci¨®n de un Gobierno de izquierdas, por vez primera en la historia, se produzca sin choques.