Problemas en el proyecto ol¨ªmpico de Sarajevo-84

Los Juegos Ol¨ªmpicos de Invierno de Sarajevo-84 parec¨ªan no plantear problemas, pero la situaci¨®n se ha complicado. De un lado, por la cr¨ªtica de los lobbies internacionales del esqu¨ª y de otro, por las rivalidades existentes entre las seis Rep¨²blicas que forman la Federaci¨®n yugoslava, unido todo ello a ciertas deficiencias presentes todav¨ªa en la etapa de rodaje de pistas e instalaciones.

Hace s¨®lo unos meses, Juan Antonio Samaranch, presidente del Comit¨¦ Ol¨ªmpico Internacional, declaraba respecto a los Juegos Ol¨ªmpicos de Invierno de Sarajevo-84 que "no tenemos problema alguno con la sede Sarajevo y creo que sus Juegos de Invierno ser¨¢n los mejores de la historia". Pero los problemas est¨¢n convirtiendo el proyecto ol¨ªmpico en uno de los m¨¢s pol¨¦micos.Las capitales del esqu¨ª, como la austr¨ªaca Innsbruck, ven en Sarajevo una sede advenediza y sin tradici¨®n. Por las mismas monta?as que rodean Sarajevo, por las que se deslizar¨¢n dentro de un a?o los mejores esqu¨ªes del mundo, sol¨ªan cazar osos, antes de la Primera Guerra Mundial, los duques austr¨ªacos, se?ores de la zona en aquel su protectorado balc¨¢nico. El disparo terrorista que puso fin a la vida del archiduque Francisco Fernando en Sarajevo, fue la primera detonaci¨®n de la gran guerra en 1914.

Se critica, por ejemplo, la pista de Bielasnica como peligrosa y con cascadas. El aeropuerto de Sarajevo suele estar cerrado bastante d¨ªas al a?o, y la gran pista de bob ha tenido que ser retocada, al no bastar para contener la fuerza centr¨ªfuga de los deportistas m¨¢s intr¨¦pidos en las curvas. La norteamericana Cindy Nelson defin¨ªa su descenso por la pista de Jahorina como "repleta de sorpresas, con nieve helada al principio y blanda al final, el campe¨®n suizo de descenso en Sapporo- 1976, Bernard Rusi, dec¨ªa que "si bien son pistas que exigen t¨¦cnicamente mucho y requieren todav¨ªa ajustes, hay que decir que son las pistas del futuro". La suiza Mar¨ªa Walliser, revelaci¨®n de esta temporada en la Copa del Mundo, lament¨® "no haberse entrenado m¨¢s" en una pista que dijo gustarle.

Pero no s¨®lo flechas internacionales le llueven a Sarajevo. Hasta el presidente de la Liga de los comunistas de Yugoslavia Mitia Ribichich, natural de una regi¨®n alpina de gran tradici¨®n, se ha referido en veladas cr¨ªticas a esa gran aventura que le saldr¨¢ a la endeudada Yugoslavia por 170 millones de d¨®lares -m¨¢s de 22.000 millones de pesetas-, de los que, aun recuperando gran parte, lo restante no dejar¨¢ de ser una inversi¨®n bastante molesta.