Argelia y Marruecos a¨²nan sus esfuerzos hacia una 'cumbre' del 'gran Magreb ¨¢rabe'

Los dirigentes magreb¨ªes contin¨²an caldeando al rojo vivo la opini¨®n p¨²blica de sus respectivos pa¨ªses en un contexto de r¨¢pida. concretizaci¨®n del gran Magreb ¨¢rabe, evocado a diario en Rabat, Argel y T¨²nez. Mientras Mauritania se prepara a firmar su adhesi¨®n al tratado de fraternidad y concordia establecido el 19 de este mes entre Argelia y Tunicia, la idea de una cumbre de los cinco jefes de Estado de ese gran conjunto regional se abre camin¨® en los c¨ªrculos diplom¨¢ticos ¨¢rabes de la capital argelina.Las virtudes del gran Magreb ¨¢rabe han sido objeto de las conversaciones sostenidas en Argel por el presidente Chadli Benyedid y el dirigente libio Abdessalam Jallud. A pesar de las dificultades actuales de las relaciones libio-argelinas, Argel desea que los libios participen en la construcci¨®n de ese gran edificio que, entre otras cosas, consolidar¨ªa la lucha palestina. En esos esfuerzos el presidente argelino, Chadli Benyedid, y el rey Hass¨¢n II de Marruecos comparten la responsabilidad de reconstruir el Magreb.

A ello hay que a?adir que, de todos los reg¨ªmenes del Magreb, el argelino es el que aparece, en teor¨ªa, mejor consolidado y con mayor capacidad de maniobra en el terreno pol¨ªtico internacional. Tunicia se encuentra en los umbrales del posburguibismo; el rey Hassan II aparece, sobre todo, preocupado por la salvaguardia de la dinast¨ªa alau¨ª, y tiene, adem¨¢s, la tarea de explicar a su pueblo un previsible giro en su pol¨ªtica en el S¨¢hara occidental; y en cuanto al coronel libio Muamar el Gadafi, lo menos que puede afirmarse es que tiene m¨¢s necesidad de adherirse al Magreb que ¨¦ste de la participaci¨®n de la Yamahiria. Gadafi anunci¨® ayer en Tobruk que ha sido firmado "a petici¨®n de Argelia, un acuerdo argelino-libio que constituye un paso en la aplicaci¨®n de la carta de Hassi Messaud" (relativa a la uni¨®n entre los dos pa¨ªses).