El 70% de la caba?a de vacuno balear procede de fecundaciones por inseminaci¨®n artificial

Alrededor del 70% de las 35.000 vacas que hay en Baleares ha nacido por el procedimiento de la inseminaci¨®n artificial. La implantaci¨®n de este sistema ha sido una de las principales realizaciones del programa de fomento de la producci¨®n c¨¢rnica del ganado vacuno que, en 1980, inici¨® el Instituto Provincial de Biolog¨ªa Animal, patrocinado por el Consell General Interinsular. Las mejoras de saneamiento y producci¨®n, llevadas a cabo durante estos tres a?os, han permitido que las vacas baleares se vendan hoy en gran parte del norte de Espa?a y, en particular, en Galicia.

El censo total de ganado vacuno en las islas, a finales de 1982, era de 35.000 cabezas, que son propiedad de unos 1.500 ganaderos, cada uno de los cuales tiene una media de 20 o 25 vacas. Esta cifra no variar¨¢, a partir de ahora, ya que el programa del Instituto de Biolog¨ªa Animal de Baleares (IPBA) prev¨¦ esta cantidad como ¨®ptima por las posibilidades de espacio y comercio del sector. No obstante, es susceptible de ser aumentada, seg¨²n las necesidades del mercado.

Antes de iniciarse el programa de reproducci¨®n animal, a finales de 1979, el ganado vacuno balear produc¨ªa razas c¨¢rnicas de inferior calidad a las de la pen¨ªnsula, mientras que las razas lecheras ofrec¨ªan la misma calidad, aunque menor producci¨®n, por ser menos numerosas. Desde entonces, la primera actuaci¨®n del IPBA se centr¨® en sanear el ganado del archipi¨¦lago, con el fin de mejorarlo para, posteriormente, proceder con el programa de aumento de la producci¨®n. Este sistema, seg¨²n el conseller de Agricultura del Consell General Interinsular, Miguel Cap¨® Galm¨¦s, se emplea por primera vez en todo el pa¨ªs. El resto de las regiones y nacionalidades con programas similares lo ha hecho a la inversa, primero mejora y luego saneamiento. El saneamiento se ve favorecido por la condici¨®n insular del territorio balear, que permite tener controlado pr¨¢cticamente todo el ganado existente y el escas¨ªsimo que puede venir de fuera, sometido a severas restricciones de entrada.

M¨¢s producci¨®n que en Europa

De esta forma, se ha conseguido que la calidad de las razas c¨¢rnicas sea similar a las mejores, entre las que s e encuentran las de ?vila, Le¨®n, Galicia y el Pirineo leridano. Paralelamente, la calidad lechera se ha elevado hasta niveles comparables a los primeros pa¨ªses productores europeos, como Dinamarca y Holanda. Seg¨²n el anuario del Ministerio de Agricultura, en 1979, Holanda produjo 4.971 litros de leche, de media anual por cabeza, seguida de Dinamarca con 4.494.En 1980, el conjunto de Espa?a dio una cifra media de 3.160 litros y, en 1981, s¨®lo Baleares produjo 5.071 litros, tambi¨¦n de media. La ¨²nica diferencia es el porcentaje de materia grasa, que en Europa es del 4%, y aqu¨ª, del 3,34%. El Departamento de Agricultura invierte en cada acto de inseminaci¨®n alrededor de 800 pesetas, que se transforman en unas 10.000 pesetas de beneficio para el ganadero, distribuidas en dos mitades de aumento de la cotizaci¨®n de cada cabeza de ganado, al nacer, y al llegar al matadero, en un tiempo total de 18 meses.

El procedimiento se inicia con la compra de semen, generalmente de las razas frisona y charolesa, en dos bancos, el Centro de Inseminaci¨®n Ganadera de Torrelavega (Cantabria) y el Centro Nacional de Selecci¨®n y Reproducci¨®n Animal de Colmenar Viejo (Madrid). Este semen llega a los bancos citados a trav¨¦s de las aportaciones de toros de cr¨ªa, dedicados exclusivamente a procrear. Entre ellos, hay un toro mallorqu¨ªn, propiedad de la ganader¨ªa LLucamet Nou, de Llucmajor (a 25 kil¨®metros de Palma), cuyo propietario, Marcos Gelabert, lo ha presentado en distintas ocasiones a los concursos para sementales, habiendo obtenido el m¨¢ximo galard¨®n en dos ocasiones. Este toro viaja a Badajoz regularmente, lugar en el que viven la mayor parte de sus colegas productores de semen. El toro bicampe¨®n, de nombre S'Avall Elevation Cartujano, es de raza frisona, naci¨® el 26 de mayo de 1977 y, solamente en 1982, produjo 17.720 dosis de semen. Pesa 1.300 kilogramos y, hasta ahora, ha tenido 49.269 hijas, que est¨¢n distribuidas en 9.495 establos de todo el pa¨ªs.

La Administraci¨®n contribuye en el programa con la cesi¨®n de medicamentos, indemnizaciones por sacrificios de razas para el saneamiento de la caba?a y con los equipos de an¨¢lisis y proceso de datos. Los gastos originados se financian con el presupuesto del Departamento de Agricultura, que se ha visto multiplicado por doce veces, desde 1979 (8 millones de pesetas) a 1982 (100 millones) y que el conseller Cap¨® considera consolidado ahora.

Con una poblaci¨®n estable de 35.000 cabezas de vacuno, en 1982 se inseminaron artificialmente 24.493 reses, frente a las 21.728 de 1981, y las 18.980 de 1980, primer a?o de comprobaci¨®n de resultados del programa. Comparando con las cifras de inseminaci¨®n de razas lecheras y c¨¢rnicas, se observa que el a?o pasado las vacas lecheras inseminadas fueron 14.031 (16.002 en 1981) y las c¨¢rnicas 10.462 (2.978 en 1981), siguiendo el criterio de cambiar las razas lecheras malas por razas c¨¢rnicas de calidad. Estas ¨²ltimas son, en su mayor parte, cruces de las razas limousine y charolesa, quedando la raza frisona para productoras de leche.

"Este programa", dice Miguel Cap¨®, "permite mejorar la calidad de las nuevas cr¨ªas para producci¨®n lechera, adem¨¢s de aumentar la calidad de las c¨¢rnicas".