La ¨²ltima oportunidad de Curro
Curro Romero torear¨¢ esta tarde su ¨²ltima corrida del ciclo ferial. Esta ser¨¢ la ¨²ltima oportunidad del diestro para resarcirse de los recientes fracasos en la feria de Sevilla. El cartel de hoy est¨¢ revestido de todo tipo de lujos. No habr¨¢ billetes. Seguro. No puede haberlo toreando Curro, y si adem¨¢s hacen el pase¨ªllo junto al camero diestros como Anto?ete y Paula, con m¨¢s raz¨®n todav¨ªa.Este cartel est¨¢ considerado como el de la feria. Hay gloria bendita, esencia pura, arte; tres toreros artistas conectados a los gustos de la afici¨®n sevillana. Si los toros de Joaqu¨ªn Barral, de procedencia N¨²?ez, embisten y re¨²nen las condiciones id¨®neas que los diestros exigen, se puede armar el taco. De lo contrario, disgustos, ira desatada y almohadillazos certeros.
Es segura la ausencia del aburrimiento. Es lo mejor que tienen estos toreros, en particular Curro, que la gente no sale de la plaza bostezando. El fara¨®n se puede encargar de calentar al personal de tendidos y cuidar¨¢ con mimo para que no se cuele el tedio en el albero. Curro Romero manifest¨® su decepci¨®n por el juego de los ocho toros lidiados hasta el momento. Ninguno, a su juicio, embisti¨® como debiera. "Pero como embista uno solo esta tarde..."
Los aficionados empiezan a estar hartos de esperar este a?o. La afici¨®n ha castigado al torero esta campa?a como nunca. En una corrida, incluso, lo llegaron a silenciar. Tal postura constituye un hito en la historia de los festejos que Curro ha toreado en Sevilla.
El fara¨®n lleg¨® a dolerse en el amor propio y tuvo una reacci¨®n an¨®mala en la corrida del pasado s¨¢bado. Curro tir¨® la montera y se ech¨® literalmente sobre el morrillo de su toro. El animalito, at¨®nito, se quej¨® y movi¨® la cornamenta. Hubo alg¨²n grito de angustia en la plaza, porque faltaban a¨²n muchas corridas de feria y ese toro esabor¨ªo iba a dejar a la gente sin Curro. El torito parece que se dio cuenta de su impertinencia y tan s¨®lo empal¨® al ¨ªdolo de la afici¨®n sevillana. Pero fue un gesto. Curro tiene a veces unos gestos que dejan helados a sus partidarios.
Esta tarde, con Anto?ete y Rafael de Paula, Romero tendr¨¢ m¨¢s compa?¨ªa. Los tres est¨¢n justitos de valor. Ser¨¢, la de esta tarde, una tema propicia a las espant¨¢s.
La lluvia que est¨¢ cayendo en Sevilla -tambi¨¦n hace fr¨ªo- puede estropear la llegada de las musas sobre la Maestranza. Estos toreros necesitan que los hados climatol¨®gicos sean propicios. Ni Paula, ni Anto?ete, ni por supuesto el propio Curro, se ven toreando con un p¨²blico vestido con pieles de astrac¨¢n. Estos genios son de lo m¨¢s raro. Si hoy hay corrida del arte, la de ma?ana ser¨¢ de los valientes: Jos¨¦ Antonio Campuzano, Emilio Mu?oz y Espartaco.
Babelia
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