Comienza el reparto de 600.000 millones de pesetas del FACA
Los hermanos Ricardo y Nicol¨¢s Fuster, conocidos como Ricky y Nicky por los norteamericanos, ser¨¢n los espa?oles que econ¨®micamente resultar¨¢n m¨¢s beneficiados con la muy probable compra de los 84 F-18A. Hace ya 15 a?os que Ricardo Fuster intervino por primera vez en un contrato de venta a Espa?a de material b¨¦lico de EE UU. Poco despu¨¦s apareci¨® c¨®mo responsable de la Compa?¨ªa Espa?ola de Aviaci¨®n, S.A. (CAESA), que en la actualidad funciona como representante de la multinacional McDonnell Douglas en nuestro pa¨ªs. Como tal, y s¨®lo en este a?o, Ricardo Fuster, en estrecha colaboraci¨®n con su hermano Nicol¨¢s, ha intervenido e intervendr¨¢ en la venta de material b¨¦lico de McDonnell a Espa?a por un valor aproximado de 400.000 millones de pesetas.La animadversi¨®n de Ricardo Fuster por los medios de comunicaci¨®n ha quedado patente a lo largo del ¨²ltimo a?o. En ning¨²n momento ha querido entrevistarse con periodista alguno para explicar los magn¨ªficos beneficios que comportan sus gestiones. En ocasiones ha preferido excusarse argumentando que algunos de sus importantes amigos pol¨ªticos convencer¨¢n a los informadores de que no le molesten. No obstante, y por presiones del propio Gobierno espa?ol, McDonnell se vio obligada a comunicar las cifras oficiales de las cantidades econ¨®micas que cobra CAESA por su representaci¨®n de McDonnell y de los beneficios que percibir¨¢ a ra¨ªz de la adquisici¨®n de los 84 F-18A Hornet.
En concepto de honorarios y gastos generales, McDonnell paga anualmente a CAESA 120.000 d¨®lares (unos 17 millones de pesetas). Adem¨¢s, Fuster percibir¨¢ el 0,25% de los ingresos que tenga McDonnell por la venta a Espa?a de los 84 Hornet, a lo que habr¨¢ que sumar los beneficios que obtenga CAESA como intermediario en las decenas de contratos entre McDonnell y empresas espa?olas dentro del programa de. contrapartidas. El programa FACA se realizar¨¢ a lo largo de los pr¨®ximos 20 a?os, y duran te ese tiempo, al menos, continuar¨¢n las fruct¨ªferas relaciones entre CAESA y la multinacional estadounidense.
La principal partida de beneficios para Fuster -incluida en el 0,25% de los ingresos de McDonnell- ser¨¢ percibida por Ricky paralelamente a los pagos del Gobierno espa?ol. Seg¨²n el plan de financiaci¨®n del FACA, Espa?a pagar¨¢ los 84 aviones entre 1983 y 1990. Este mismo a?o deber¨¢ abonar 220 millones de d¨®lares. Hasta el momento, ya ha pagado 18 millones, y tras la firma del contrato definitivo abonar¨¢ otros 80. Los pagos anuales se incrementar¨¢n progresivamente hasta 1987, a?o en que el Gobierno espa?ol abonar¨¢ 430 millones de d¨®lares. A partir de ese a?o, las cantidades anuales volver¨¢n a descender paulatinamente hasta 1990, en que deber¨¢n estar abonados los 310.000 millones destinados a la adquisici¨®n de los aparatos.
Similares porcentajes de beneficios recibe o ha recibido CAESA, seg¨²n han informado fuentes gubernamentales, con otras dos importantes operaciones realizadas este a?o entre McDonnell y la Armada espa?ola. La primera por su volumen econ¨®mico, aprobada por el Gobierno hace dos meses fue la adquisici¨®n de 12 aviones Harrier 2 de despegue vertical, por 35.000 millones de pesetas. La segunda ha consistido en la compra de un centena? de misiles Harpoon, cada uno de los cuales vale m¨¢s de 100 millones de pesetas.
Pero los beneficios de la familia Fuster procedentes del FACA no se quedar¨¢n s¨®lo posiblemente en los derivados de la compra en s¨ª de los aviones y de las gestiones que realicen, como representantes de McDonnell, en el programa de compensaciones. En ¨¦ste mismo, y en la lista de empresas que pretenden suscribir contratos con empresas norteamericanas, figura Stone Ib¨¦rica, S.A., cuya sede est¨¢ en el mismo lugar que CAESA -en la calle de Antonio Maura, de Madrid-, y uno de cuyos m¨¢ximos responsables es Nicol¨¢s: Fuster. En este caso, Nicol¨¢s Fuster, como se indica en el proyecto del programa, desea vender productos relacionados con el sector de los ferrocarriles a la firma estadounidense Naranico.
El coste de una imagen
El sector de las empresas de imagen espa?olas ha sido otro de los que ha resultado beneficiado, con el programa FACA. Hasta julio del pasado a?o, cuando el Gobierno de UCD aprob¨® inicialmente la compra de 84 F-18A, fueron varias las firmas y sociedades que realizaron trabajos espor¨¢dicos para las multinacionales que compet¨ªan. A partir de julio, la propia McDonnell, como virtual ganadora del concurso, convoc¨® a las principales empresas de imagen espa?olas para seleccionar a habr¨ªa de cuidar su imagen en nuestro pa¨ªs a partir de ese momento. Se presentaron Gesmagen, de Jos¨¦ Antonio Mart¨ªn; Link, de Antonio Bernab¨¦u; Eidos, de Ram¨®n Roca; Compa?¨ªa Espa?ola de Relaciones P¨²blicas Internacionales, de Jaime Urzaiz, y Fomento de la Vida P¨²blica, de Fernando Muniesa y C¨¦sar Vacchiano.
Esta ¨²ltima empresa fue la seleccionada, y suscribi¨® un contrato con McDonnell que, por compromiso verbal, podr¨¢ prolongarse durante 20 a?os, si bien se renueva peri¨®dicamente. McDonnell pagar¨¢ anualmente a Fomento de la Vida P¨²blica 5.000 d¨®lares. No obstante, la empresa espa?ola realiza actualmente gestiones para encargarse de las relaciones p¨²blicas de McDonnell para toda Europa. En estos momentos, Grecia y Turqu¨ªa seleccionan su futuro avi¨®n de combate, y entre los competidores figura el F-18A. Una de las empresas perdedoras del concurso, Compa?¨ªa Espa?ola de Relaciones P¨²blicas Internacionales, consigui¨® en octubre pasado, sin embargo, un acuerdo con Carl Byor & Assoccial es Ltd., empresa de imagen encargada de las relaciones p¨²blicas de Hughes, fabricante del radar del F-18A. La firma espa?ola cobra por cada comunicado que difunde en Espa?a sobre Hughes de 60.000 a, 70.000 pesetas, seg¨²n han confirmado personas de la propia empresa.
Bufetes privilegiados
Otro sector importante en este reparto de beneficios es el de los bufetes de abogados. El de J. & A. Garrigues asesora a McDonnell sobre sus contratos en Espa?a desde hace varios a?os, y en relaci¨®n con el FACA, desde llace un a?o. Hasta el momento, seg¨²n el responsable del despacho, Ram¨®n LLad¨®, han cobrado de la multinacional norteamericana unos cinco millones de pesetas, cifra que se ver¨¢ fuertemente incrementada en los a?os pr¨®ximos, en el probable caso de que J. & A. Garrigues contin¨²e asesorando en los rr¨²ltiples contratos de compensaciones que se efect¨²en en el futuro. El bufete cobra a McDonnell por hora trabajada de 100 a 150 d¨®lares. Igualmente, los abogados de Garrigues asesoran a la multinacional Northrop, propietaria de un 40% de los elementos del F-18A. Los Garrigues, muy habituados a trabajar con multinacionales americanas, tienen despachos en Madrid -36 abogados-, Nueva York -dos- y Barcelona -cuatro- El comit¨¦ ejecutivo de la sociedad lo integran, entre otros, el l¨ªder liberal Antonio Garrigues, Rani¨®n Llad¨®, Andr¨¦s Trujillo, Daniel Garcia Pita y Carlos Loring.
Como en el caso de los hermanos Fuster, un hermano de Ram¨®n Llad¨®, el ex embajador de Espa?a en Washington Jos¨¦ Llad¨®, intenta conseguir alg¨²n beneficio econ¨®mico del FACA. T¨¦cnicas Reunidas, la empresa en la que Jos¨¦ Llad¨® ocupa un alto cargo de responsabilidad, ha proputesto a McDonnell, en el programa de compensaciones, exportar a EE UU t¨¦cnicas para refirtar productos qu¨ªmicos y petroqu¨ªmicos.
Otro bufete que asesora a McDormell es el de los ex dirigentes de UCI) Miguel Dom¨¦nech y Luis Ortiz, especializado en asuntos fiscales, que el pasado a?o firm¨® un contrato con la multinacional americana por valor de 50.000 d¨®lares anuales. Luis Ortiz, ex ministro de Obras P¨²blicas, es uno de los 12 diputados centristas, y su campa?a de imagen anterior a las elecciones generales fue encomendada a Muniesa & Vacchiano Consultores, sociedad que tambi¨¦n se encarg¨® de la campa?a realizada por el ex ministro de Defensa Alberto Oliart en Badajoz.
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