La 'salud' de Alicia Garc¨ªa

Dicen que el fil¨®sofo Cirsio muri¨® de un ataque de risa, al ver c¨®mo un burro com¨ªa higos. Nosotros llevamos alg¨²n tiempo leyendo los art¨ªculos que semanalmente publica en EL PAIS Alicia Garc¨ªa bajo el t¨ªtulo gen¨¦rico de Salud, con objeto de remediar nuestros achaques diarios; y, pese a lo revulsiva que nos resulta la purga semanal de sus consejos (que, por otra parte, siempre nos vemos tentados a leer), hasta el momento conservamos nuestro humor. Y nuestra salud.Y decimos revulsiva porque, sin entrar ahora en recetas, p¨®cimas y otras cosas, nos parece que los conocimientos cient¨ªficos de Alicia Garc¨ªa (y, consecuentemente, sus explicaciones), tienen una base cient¨ªfica inversamente proporcional a su osad¨ªa, que no es poca, por lo cual atenta contra integridad, produci¨¦ndose de todo, menos indiferencia.

De modo puramente simb¨®lico pasamos a citar tres puntos de desacuerdo basados en afirmaciones suyas que quisi¨¦ramos rebatir:

1. La carencia de bilis o su secreci¨®n a destiempo produce cuadros de malabsorci¨®n de grasas, que cursan siempre con diarreas, muchas diarreas; y no con estre?imiento (como ella dice; "dado que las grasas se acumulan y taponan el fluido intestinal", EL PAIS, 15-5-1983).

2. Los laxantes no causan alteraci¨®n alguna de la mucosa intestinal ni "destruyen" (?) la flora intestinal. El paso de "elementos podridos y fermentados" a la sangre, en caso de producirse, desencadenar¨ªa un shock anafil¨¢ctico, cuadro que por su mortalidad no nos atrevemos a desear ni a nuestros peores enemigos.

3. El melocot¨®n no tiene agua viva. El agua es una mol¨¦cula (no un ser vivo), por lo dem¨¢s, inorg¨¢nica. Por consiguiente, no nace ni crece ni muere. Al igual que la energ¨ªa, el agua no se destruye ni se crea, simplemente escasea.

Para terminar, s¨®lo nos resta decir que desear¨ªamos (y sugerimos) que los pr¨®ximos comentarios de Alicia Garc¨ªa tuviesen mayor rigor y base cient¨ªfica. /