Un descampado con f¨¢ciles accesos

El lugar donde fue liberado en la madrugada del pasado lunes Diego Prado, a una distancia pr¨®xima al kil¨®metro del casco urbano del municipio madrile?o de Coslada, es una aut¨¦ntica encrucijada de caminos, en medio de un descampado, a la que se puede acceder en corto de espacio de tiempo por diferentes v¨ªas desde cualquier punto de la capital. El lugar dista 15 kil¨®metros del centro.Sobre dicho punto convergen un camino de arena denominado de los Toros, que enlaza con la Avenida de Guadalajara del barrio madrile?o de San Blas, y la carretera vieja proveniente del barrio de Vic¨¢lvaro, cuya prolongaci¨®n va a dar a la autopista de Barcelona. Al lugar viene: a parar una carretera en la que confluyen tanto la nueva carretera que enlaza Vic¨¢lvaro con Coslada, como otro desv¨ªo de la carretera de Barcelona que viene a desembocar en dicho municipio, lo que posibilitar¨ªa que los terroristas hubiesen llegado al mismo desde Torrej¨®n u otras localidades ubicadas en torno a dicha carretera.

A Vic¨¢lvaro se puede acceder f¨¢cilmente desde las barriadas m¨¢s pr¨®ximas del sur-este madrile?o como Vallecas, Elipa, Ventas, San Blas, Moratalaz, Canillas. Pero en realidad desde cualquier otro punto de la ciudad se puede alcanzar en pocos minutos el lugar en que fue liberado Diego Prado, dada su relativa proximidad a la M-30, el cintur¨®n perif¨¦rico que permite rodear Madirid de norte a sur a gran velocidad. Si como insiste la polic¨ªa el sectiestrado estaba escondido en un piso de la zona norte, los secuestradores pudieron acceder a la zona de Coslada bien a trav¨¦s de la M-30, con salida a la autopista de Barajas, bien a trav¨¦s del eje norte-sur, que supone la calle de Arturo Soria.

Resulta evidente de todo ello, la multiplicidad de posibles conexiones entre dicho punto y cualquier otro situado en el casco urbano madrile?o, particularmente de su parte occidental.