La pol¨ªtica exterior

He residido en Londres la mayor parte de los ¨²ltimos cinco a?os y he podido observar con satisfacci¨®n la r¨¢pida alza en la consideraci¨®n que recibe el r¨¦gimen pol¨ªtico de nuestro pa¨ªs en los medios de comunicaci¨®n ingleses. Se capta que es un sentimiento general el deseo de que Espa?a se integre de forma definitiva a la vida europea. Es, sin embargo, muy desalentador ver como algunos pol¨ªticos espa?oles persisten en situarnos entre los pa¨ªses del tercer mundo. Su actitud parece dirigida a mendigar favores de los pa¨ªses ¨¢rabes productores de petr¨®leo y fomentar los mercados hispanoamericanos. Lo que me resulta m¨¢s deplorable es que ¨¦sta siga siendo en 1983 la l¨ªnea del ministerio de Asuntos Exteriores, tal como me fue confirmado cuando recientemente escuch¨¦ la intervenci¨®n del se?or Mor¨¢n en un programa que la BBC dedic¨® a la situaci¨®n pol¨ªtica espa?ola. En relaci¨®n a ¨¦sto, no puedo evitar mencionar que esperaba que un diplom¨¢tico profesional se expresase con m¨¢s soltura en ingl¨¦s. Nuestro ministro record¨® a un ministro de un pa¨ªs reci¨¦n descolonizado revindicando impotente un trato m¨¢s justo por parte de una superpotencia. El tema en el que esta actitud se hizo especial mente evidente fue, l¨®gicamente, el eterno contencioso anglo-espa?ol sobre el Pe?¨®n de Gibraltar. Soy de la opini¨®n de que aunque la reivindicaci¨®n espa?ola est¨¢ so bradamente justificada, nuestra posici¨®n negociadora mejorar¨ªa notablemente si la presente y anacr¨®nica actitud de "naci¨®n pobre pero honrada, ofendida por la desvergonzada, ocupaci¨®n del Pe?¨®n por la p¨¦rfida Albion" se sustituyese por la m¨¢s constructiva de "Estado europeo moderno que se d¨ªrige a otro-para tratar de resolver un anacronismo administrativo-hist¨®rico". El tema de Gibraltar no me preocupar¨ªa si no formara parte de una postura generalizada del ministerio de Exteriores, que descuida la aproximaci¨®n a Europa adoptando una pol¨ªtica confusa en la OTAN y en la negociaci¨®n de, Bruselas para la integraci¨®n en el Mercado Com¨²n. No puede ofrecer muchas dudas que ir¨¢ en beneficio de Espa?a la integraci¨®n en el bloque econ¨®mico m¨¢s importante del mundo. Por el contrario, la continuaci¨®n de la pol¨ªtica de alineaci¨®n con los pa¨ªses del Tercer Mundo, aparte de parecerme absurda y oportunista, no nos reportar¨¢ ning¨²n beneficio pr¨¢ctico, porque los mercados internacionales se ganan ofreciendo productos de calidad a precios competitivos, tal como Jap¨®n est¨¢ demostrando cada d¨ªa, y no mendigando una compra espor¨¢dica. La prensa comenta que el se?or Gonz¨¢lez presta ¨²ltimamente m¨¢s atenci¨®n a los consejos del ex-canciller alem¨¢n H. Schmidt y del presidente Mitterrand, que a los de su propio ministro. Esta nueva orientaci¨®n debiera verse reflejada en un cambio de l¨ªnea del Palacio de Santa Cruz./