El 75% de los espa?oles adultos, partidario de la despenalizaci¨®n del aborto, restringida o amplia

El 75% de los espa?oles adultos es partidario de la despenalizaci¨®n del aborto, sea ¨¦sta restringida, correspondiente a los tres supuestos contemplados en la reforma del C¨®digo Penal propuesta por el Gobierno (50%), o muy amplia, cuyo ¨²nico l¨ªmite consiste en la determinaci¨®n de unos plazos (25%). Los datos corresponden a un informe-resumen de los resultados de una investigaci¨®n sociol¨®gica, llevado a cabo p9r los profesores Alfonso Ort¨ª y Angel de Lucas, bajo el t¨ªtulo Representaciones colectivas sobre la mujer y la familia (Un an¨¢lisis de las actitudes sociales ante el aborto mediante discusiones de grupo) -y preparado por el gabinete t¨¦cnico del Centro de Investigaciones Sociol¨®gicas, que aparece, junto con otros estudios y encuestas, incluidas en el n¨²mero de enero-marzo de la Revista Espa?ola de Investigaciones Sociol¨®gicas, dedicada al tema monogr¨¢fico Familia y aborto, que fue presentado el jueves en Madrid.En el mismo n¨²mero de la revista se presentan unas encuestas del Centro de Investigaciones Sociol¨®gicas (CIS) sobre la evoluci¨®n de la opini¨®n en torno a la despenalizaci¨®n del aborto. Esta ha ascendido de un 27% en 1979 a un 39% en 1981. En febrero de 1983, un 57% de los encuesta dos manifestaba su acuerdo con la decisi¨®n del Gobierno de permitir el aborto cuando el embarazo sea consecuencia de una violaci¨®n, ponga en peligro la vida o la salud de la madre o se tenga la certeza de que existen anormalidades graves e incurables en el feto.

Los porcentajes var¨ªan, en ¨¦sta ¨²ltima encuesta de febrero pasado, ante cada situaci¨®n planteada El 66% estima que la interrupci¨®n del embarazo debe permitirse cuando peligra la vida de la madre el 62%, cuando la continuaci¨®n del embarazo amenace la salud de la madre o el ni?o pueda nacer con una grave enfermedad incurable; el 56% aceptar¨ªa el aborto cuando el embarazo fuera producto de una violaci¨®n. S¨®lo el 24% aceptar¨ªa el aborto siempre que la mujer lo decidiera libremente. Al igual que en 1979, en esta encuesta los hombres son m¨¢s permisivos que las mujeres. Por grupos de edad, son m¨¢s partidarios de la despenalizaci¨®n del aborto los menores de 45 a?os y, entre ¨¦stos, el grupo de 22 a 25 a?os es el que presenta mayor tasa de permisividad.

Los profesores Ort¨ª y De Lucas, autores del estudio de investigaci¨®n sociol¨®gica sobre la interrupci¨®n del embarazo, dividen las actitudes en torno al aborto en tres posiciones. La primera, "integrista o prohibicionista" (25% de los espa?oles adultos), considera el aborto como un asesinato infanticida, concibe a la mujer como simple madre reproductora y ve la despenalizaci¨®n del aborto como una ofensiva generalizada contra la familia patriarcal; la segunda es la que el estudio denomina "progresista o reivindicativa", con grados distintos de radicalismo, que representa a otro 25%. de la poblaci¨®n adulta, concibe el aborto como un derecho subjetivo de la mujer, que se fundamenta en un derecho a una maternidad querida y responsable, y considera que el derecho social al aborto debe garantizarse con la supervisi¨®n m¨¦dica y los medios econ¨®micos de la Seguridad Social.

La mayor¨ªa tolerante

En tercer lugar, los profesores Ort¨ª y De Lucas hablan de la "mayor¨ªa tolerante", que representa en tomo al 50% de la poblaci¨®n adulta y queda definida por la aceptaci¨®n decidida de los tres casos previstos en el proyecto de ley propuesto por el Gobierno. El supuesto de violaci¨®n marca, por el momento, el list¨®n m¨¢s alto de la permisividad dentro de esta mayor¨ªa tolerante, ya que lo apoya un 56% de la poblaci¨®n adulta y, de modo muy especial, las mujeres, seg¨²n la encuesta antes citada del Centro de Investigaciones Sociol¨®gicas, realizada en febrero de este a?o. La probabilidad de malformaciones en el feto o nacimiento con graves taras f¨ªsicas o ps¨ªquicas es aceptada por el 62% de la poblaci¨®n adulta y la reivindicaci¨®n m¨¢s insistente, generalizada y urgente es la relacionada con el supuesto de peligro para la vida de la madre (66% de la poblaci¨®n adulta en la encuesta aludida m¨¢s arriba).Dentro de la posici¨®n "integrista o prohibicionista", los investigadores empiezan a ver una ruptura de sus bases sociales, debida al "monolitismo, la rigidez y la extrema intransigencia del discurso integrista". La fracci¨®n relativamente progresiva, conservadora humanista, cuyos n¨²cleos m¨¢s representativos est¨¢n constituidos por mujeres, admite ya la legitimidad de la indicaci¨®n de un aborto regulado en el caso de peligro de la madre.

Partidarios entre la extrema derecha

En noviembre de 1979, un Bar¨®metro de Opini¨®n P¨²blica, realizado por el CIS sobre una muestra de 1.188 personas, daba como resultado que el porcentaje de encuestados de extrema derecha partidarios de legalizar el aborto era mayor que los de la derecha o el centro. El sondeo arrojaba un porcentaje del 23% de partidarios de legalizar la interrupci¨®n voluntaria del embarazo entre los espa?oles de extrema derecha (nueve de los consultados), mientras que en la derecha daba un 11 % (117 consultados) y en el centro, 17% (sobre 306 encuestados). Por profesiones, los vendedores encabezaban la tabla de permisividad (46% de los 35 encuestados), seguidos por los subalternos (41% de los 64 consultados), cuadros medios (40% de 199) y cuadros superiores (33% de 79). Ocupaban los lugares m¨¢s bajos de la tabla los independientes (13 % a favor de la despenalizaci¨®n del aborto sobre 193 preguntados), peones (17% sobre 225) y empresarios (24% de 42 consultados).Por lo que respecta a la situaci¨®n laboral, los estudiantes (59% de 66) y los parados (53% de 57) daban los ¨ªndices m¨¢s altos de permisividad. La menor aceptaci¨®n se daba entre los jubilados (10% de 113) y las personas dedicadas a sus labores (15% de 393).