Melodrama con sexo y dinero
En 1951 pocas parejas protagonistas pod¨ªan compararse con la de Odio y orgullo. Fue la casualidad quien la form¨®, una casualidad revestida de decisi¨®n caprichosa de Howard Hughes, ya que si es Ava Garndner quien embruja a Robert Mitchum, quien estaba prevista como cabecera de cartel era Ann Sheridan. Pero el millonario, cuya pasi¨®n por las actrices no era ning¨²n secreto, acababa de darse cuenta de que miss Garndner era la m¨¢s hermosa e inquietante de las presencias de holiwoodenses, descubrimiento ante el cual de nada sirvieron los derechos contractuales de Ann Sheridan.Como melodrama sure?o, ambientado en Nueva Orleans -los decorados son espl¨¦ndidos-, parece casi inevitable que la historia de amor imposible gire alrededor de diferencias de pecunio y sangre. El malo de la funci¨®n es el elegante Melvyn Douglas, un actor ya fallecido.
Combinaci¨®n expl¨ªcita de sexo y dinero, Odio y orgullo tambi¨¦n puede verse como una premonici¨®n de los seriales triunfadores en televisi¨®n, de las series Dallas o Dinast¨ªa. La habilidad de Stevenson y el fulgor que se desprende de la pareja protagonista, hacen que la comparaci¨®n sea favorable a la propuesta cinematogr¨¢fica.
Odio y orgullo se emite hoy a las 22.30 por la segunda cadena.
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