Tres mujeres de una misma familia mueren en el hundimiento de un edificio de Tarragona, tras una explosi¨®n de gas
Tres personas resultaron muertas y otras seis heridas de distinta gravedad en el hundimiento de un inmueble de planta baja y tres pisos provocado por una explosi¨®n ocurrida ayer a las 5.55 horas en Tarragona. Entre los restos del edificio se encontraron contenedores de acetileno y ox¨ªgeno, gases utilizados para las soldaduras aut¨®genas, pertenecientes probablemente a un taller de electricidad instalado en el primer piso, por lo que se supone que un escape en estos contenedores pudo ser el origen de la tragedia. Las tres v¨ªctimas mortales y cinco heridos pertenecen a la familia de Jos¨¦ Mar¨ªa Ruiz, un polic¨ªa nacional destinado en L¨¦moniz. El cad¨¢ver de la ni?a de seis a?os Esmeralda Ruiz Carrillo, fue extraido de los escombros a las 11.45 horas, mientras que el de su madre, Francisca Carrillo Sanguino, fue recuperado a las 17.30 horas.
El cuerpo de la tercera v¨ªctima, Juana Sanguino Caba?a, abuela y madre de las anteriores, respectivamente, fue rescatado de los escombros poco despu¨¦s de las 9 de la noche. La explosi¨®n provoc¨® el hundimiento de un edificio de tres plantas, situado en los n¨²meros 5 y 7 de la calle Rebolledo, de Tarragona, y caus¨® tambi¨¦n da?os importantes en los inmuebles situados junto a ¨¦ste, en el barrio del Serrallo, en el casco antiguo, cerca del puerto. El vecindario que acudi¨® inmediatamente al lugar, al o¨ªr la explosi¨®n, explic¨® que primero se oy¨® un ruido seco, despu¨¦s se produjo un gran resplandor y a continuaci¨®n se not¨® un fuerte olor a p¨®lvora. Tras la explosi¨®n y el inmediato derrumbe quedaron s¨®lo en pie las paredes exteriores del edificio, que m¨¢s tarde hubieron de ser derribadas porque amenazaban con caer sobre los bomberos que efectuaban la b¨²squeda de las v¨ªctimas.La nota oficial distribuida por los bomberos de la Generalitat a primera hora de la tarde indicaba que "parece ser que la explosi¨®n ha sido provocada por acumulaci¨®n de gas butano en una de las viviendas, procedente del escape de una botella". Este inmueble no dispon¨ªa de gas ciudad. Los bomberos que proced¨ªan a las operaciones de salvamento opinaron que, tanto si la explosi¨®n era debida a acumulaci¨®n de gases o a la explosi¨®n de una bombona butano, "la botella ten¨ªa que estar situada estrat¨¦gicamente para destruir un edificio de varios pisos.
Las muertes y da?os a los heridos se produjeron por lesiones derivadas de aplastamiento en todos los casos, excepto en el del inquilino del ¨²ltimo piso, que sufre quemaduras en la mitad del cuerpo. Las causas del siniestro fueron objeto de numerosas conjeturas durante todo el d¨ªa, debido a la aparici¨®n de datos que planteaban numerosos interrogantes. Ninguna de las viviendas del inmueble dispon¨ªa del preceptivo contrato de butano, lo que significa que probablemente las instalaciones de gas no dispon¨ªan de las garant¨ªas reglamentarias. En los trabajos de salvamento aparecieron doce bombonas de butano que no hab¨ªan hecho explosi¨®n. Estos datos llevaron a pensar que la explosi¨®n se hab¨ªa producido en el ¨²ltimo piso.
Del inquilino de este piso se fue sabiendo a lo largo de la tarde que viv¨ªa solo y que est¨¢ separado de su esposa desde no hace mucho tiempo. Se dec¨ªa tambi¨¦n que hab¨ªa obtenido de la Seguridad Social la calificaci¨®n de inutilidad laboral total por enfermedad que no se pudo precisar. Sus vecinos sab¨ªan poco o nada de ¨¦l, pues hac¨ªa una vida muy solitaria, seg¨²n explicaron. A?adieron que, al parecer, ninguno de sus hijos quer¨ªa vivir con ¨¦l y que uno de estos est¨¢ cumpliendo el servicio militar en Tarragona, en una compa?¨ªa de operaciones especiales.
Otros dos edificios, situados en los n¨²meros 5 y 7 de la calle Cartagena, colindantes con los derruidos, resultaron da?ados. La onda expansiva rompi¨® los cristales de los edificios colindantes y los cascotes producidos por la explosi¨®n causaron tambi¨¦n desperfectos en autom¨®viles aparcados en las inmediaciones.
Las fallecidas pertenec¨ªan a la familia del polic¨ªa nacional Jos¨¦ Mar¨ªa Ruiz, de quien eran hija, esposa y suegra. Este polic¨ªa estaba destinado en Zaragoza y fue trasladado la semana pasada a Lem¨®niz, Vizcaya. La familia es originaria de Puebla de la Calzada, provincia de Badajoz, y se encontraba en Tarragona pasando unos d¨ªas de vacaciones con unos parientes.
Cinco de los seis heridos pertenec¨ªan a esta misma familia. Tres de los que fueron rescatados con vida se encuentran en estado grave, uno en estado menos grave y el otro leve. Jorge Ruiz Carrillo, de cinco a?os de edad, sufre traumatismo craneoencef¨¢lico y contusi¨®n abdominal, en estado grave; Ana Mar¨ªa Carrillo Sanguino, de 18 a?os, sufre traumatismo craneoencefalico y contusi¨®n nasal; Emiliana Carrillo Sanguino, de 20 a?os, sufre s¨ªndrome de aplastamiento por compresi¨®n de espalda, tambi¨¦n en estado grave.
Diego Carrillo Fern¨¢ndez, de 55 a?os, en estado menos grave, sufre traumatismo craneoencef¨¢lico, herida incisa en regi¨®n mentoniana, fracturas costales y contusiones y lesiones varias; Diego Carrillo Sanguino, de 23 a?os, en estado leve, sufre contusi¨®n en el codo derecho y s¨ªndrome de aplastamiento. Los heridos fueron ingresados en la residencia de la Seguridad Social Juan XXIII de Tarragona.
El herido quemado
El sexto herido, Alfonso Zaragoza Montalb¨¢n, de 56 a?os de edad, fue trasladado a la residencia de la Seguridad Social del Valle de Hebr¨®n de Barcelona. Fue ingresado en la unidad de cuidados intensivos. Su estado fue calificado de "muy grave" por fuentes de la citada residencia, las cuales explicaron que el herido sufr¨ªa quemaduras en el 52% de su cuerpo.
El tercer cad¨¢ver, rescatado 15 horas despu¨¦s
Centenares de personas se agolparon durante todo el d¨ªa en las inmediaciones de las casas afectadas por el hundimiento en el humilde barrio del Serrallo, habitado fundamentalmente por familias de pescadores e inmigrantes. Las tareas de rescate de los cuerpos atrapados entre los escombros se desarrollaron lentamente a causa de las medidas precautorias que fue necesario tomar.Pat¨¦ticas escenas de dolor protagonizadas por los familiares de las v¨ªctimas se registraron a lo largo de la jornada, a medida que aparec¨ªan objetos pertenecientes a las desaparecidas, y, sobre todo, cuando ¨¦stas pudieron ser localizadas y rescatadas. Un silencio sepulcral inund¨® las calles Rebolledo y Cartagena cuando, poco despu¨¦s de las 11.30 los bomberos descubr¨ªan el cad¨¢ver de la ni?a Esmeralda Ruiz Carrillo. El momento de m¨¢xima tensi¨®n, sin embargo, se produjo a media tarde -12 horas despu¨¦s de la explosi¨®n- cuando, coincidiendo con la llegada a Tarragona del polic¨ªa nacional Jos¨¦ Mar¨ªa Ruiz, pudo ser desenterrado el cuerpo de su esposa, Francisca Carrillo Sanguino. La tercera v¨ªctima, Juana Sanguino Caba?as, no pudo ser rescatada hasta minutos despu¨¦s de las 9 de la noche, 15 horas despu¨¦s de iniciarse la tragedia.
Desde distintos puntos de la geograf¨ªa espa?ola, los parientes de la familia afectada se enteraron de lo sucedido a trav¨¦s de los medios de comunicaci¨®n, desplaz¨¢ndose a Tarragona inmediatamente.
A las dos en punto de la tarde dos soldados de la Compa?¨ªa de Operaciones Especiales del regimiento Badajoz 26 del Ej¨¦rcito de Tierra, con base en Tarragona, se acercaron apresuradamente hasta la casa. Uno de ellos, visiblemente inquieto, pregunt¨® por el estado de salud de? solitario habitante del piso superior de la vivienda y del que nadie parec¨ªa acordarse. Se trataba del hombre de mediana edad, Alfonso Zaragoza Montalb¨¢n, que sufri¨® graves quemaduras y tuvo que ser trasladado a la residencia de Valle de Hebr¨®n de Barcelona.
Diversas autoridades se acercaron a lo largo del d¨ªa para interesarse por los trabajos de desescombro. El alcalde, Josep Maria Recasens, acudi¨® al lugar de los hechos a primera hora de la ma?ana, mientras que el delegado territorial de la Generalitat, Josep Sendra Navarro, interrumpi¨® sus vacaciones en el Pirineo para seguir de cerca la evoluci¨®n del tr¨¢gico suceso.
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