Preocupacion e inquietud por la floja pretemporada del Real Madrid

Di St¨¦fano tiene ante s¨ª un reto dif¨ªcil: intentar cambiar el esquema y el f¨²tbol horizontal que el Madrid ha exhibido en sus cuatro primeros encuentros de pretemporada. "No tenemos velocistas arriba, pero no es cuesti¨®n de delanteros solamente. Hay que romper en el medio campo y profundizar m¨¢s". Lentitud, exceso de pases en corto, el per¨ªodo de acoplamiento que va a necesitar Lozano y la grave disyuntiva de dos extranjeros que quieren jugar de libres son los problemas b¨¢sicos que deber¨¢ afrontar de ra¨ªz el t¨¦cnico madridista. El triunfo ante el Dinamo de Kiev, ¨²nico en los cuatro encuentros jugados, no contribuye a alejar la preocupaci¨®n e inquietud que se detecta en el seno del club.

Las caracter¨ªsticas de la mayor¨ªa de los hombres de la plantilla, en especial de los habituales titulares, son, seg¨²n Di Stefano, las de una magn¨ªfica calidad individual, un excelente control del bal¨®n, y el dominio de la parcela central del campo ante los rivales. Estos aspectos positivos se han visto superados por la realidad de unos resultados adversos.Fernando Morena, el uruguayo que jug¨® en el Rayo Vallecano y en el Valencia, y que estuvo presente con el Pe?arol en el Teresa Herrera, es tajante: "He visto muy lento al Madrid. Y Santillana est¨¢ demasiado desasistido en punta. El solo no podr¨¢ resolver todos los encuentros. Los rivales lo tienen relativamente f¨¢cil. Les basta con marcarle f¨¦rreamente para anular en un tanto por ciento muy elevado las posibilidades de gol del equipo". Vicente Miera, segundo seleccionador nacional, sopesaba con su habitual frialdad t¨¦cnica las caracter¨ªsticas del Real Madrid respecto al Athl¨¦tic de Bilbao, dos de los equipos que mayor n¨²mero de jugadores aportar¨¢n esta temporada a la selecci¨®n. "Son dos conceptos distintos. El Madrid basa su juego en la calidad individual de sus hombres, en un mayor control de la pelota, en pases cortos y en apoyo. El Athl¨¦tic practica un f¨²tbol m¨¢s sencillo si se quiere, con desplazamientos largos, cerr¨¢ndose con firmeza atr¨¢s y lanzando contragolpes r¨¢pidos".

El principal interesado es Alfredo Di St¨¦fano. Frente al Dinamo de Kiev supo realizar en el descanso un cambio de sistema tan profundo que un equipo corno el Madrid, de caracter¨ªsticas lentas, maniobr¨® durante muchos. minutos con permutas y velocidad en sus hombres. Di St¨¦fano lo ve claro. Una y otra vez insiste en que "nos hace falta un hombre que rompa en el medio campo. Hacemos jugadas, llegamos con calidad y claridad a 30 metros del ¨¢rea, pero ah¨ª lanzamos tiritos, bombones. No disponemos de dos velocistas en punta, as¨ª que el juego habitual del equipo no puede concebirse con desplazamientos r¨¢pidos. No es un problema de delanteros, sino de una concepci¨®n t¨¢ctica y adaptarse a las caracter¨ªsticas de los muchachos".

Bernardo, revelaci¨®n

Teniendo en cuenta que Di St¨¦fano echa de menos a un hombre como Bonet, un central que sale en vertical hacia arriba, actualmente lesionado, y que rompe -eterna obsesi¨®n del entrenador- al adversario, parece conveniente y necesario echar mano de un hombre joven, procedente del Castilla, y que ha sab¨ªdo aprovehar las dos oportunidades que Di St¨¦fano le ha concedido. Se trata de Bernardo, jugador polivalente, un correkil¨®metros no exento de t¨¦cnica, que sabe defender y desdoblarse en ataque y que en 90 minutos de juego -45 frente al Eintracht de Francfort, en Udine, y otros tantos.ante el Dinamo sovi¨¦tico- remat¨® al poste una excepcional jugada por la izquierda, propici¨®, con una jugada por la derecha y posterior centro, el gol de Santillana que empat¨® el partido ante el Dinamo, e incluso marc¨® el tercero.En cuanto a Lozano, podr¨ªa defin¨ªrsele como a medio camino entre los calificativos de buen y gran jugador. No es una estrella en la correcta aplicaci¨®n del t¨¦rmino, pero ya ha comenzado a dejar patente que es un hombre con calidad. Maneja las dos piernas -con la derecha estrell¨® dos balones en el travesa?o y con la izquierda lanz¨® u?a falta magistral, que el meta del Dinamo de Kiev envi¨® a c¨®rner-, realiza acciones pintureras que gustan al espectador, posee un buen regate y se mueve con soltura en posiciones de media pounta. Nunca pegado a la banda, y menos a la izquierda, como le situ¨® Di St¨¦fano en el primer tiempo frente al Athl¨¦tic. Le falta explosi¨®n en carrera, aceleraci¨®n y cambio de ritmo, al margen de su floja consistencia f¨ªsica.

El panorama madridista se complica con los dos extranjeros, Stielike y Metgod. El alem¨¢n quiere jugar de libre, y Di St¨¦fano parece decidido a situarle ah¨ª, formando t¨¢ndem defensivo con Bonet. Pero ambos est¨¢n lesionados, y en el caso de Stielike -habr¨¢ que tocar madera -sobre todo los dirigentes- para que no tenga que pasar por el quir¨®fano, lo que podr¨ªa provocar un cisma en la directiva. En cualquier caso, con Stielike de libre, la pregunta surge obligada: ?y Metgod? El holand¨¦s, buen jugador, fr¨ªo, con t¨¦cnica y buen disparo, no es, por contra, el hombre que necesita el equipo, m¨¢xime cuando no acaba de convencer a Di St¨¦fano y cubre, adem¨¢s, una de las dos plazas fundamentales de extranjero. Si Di St¨¦fano se decide a dejarle en el banquillo, los aficionados pueden comenzar a preguntarse el porqu¨¦ de su fichaje, y por cuatro temporadas.

A algunos dirigentes les aburre el juego del equipo. Las caras del presidente, De Carlos, y del vicepresidente, Mart¨ªnez Laforgue, eran todo un poema en el descanso del partido de consolaci¨®n del Teresa Herrera. La pretemporada, 10 d¨ªas en la lobalidad austr¨ªaca de Billaco -Zanussi pagaba-, seis en la ciudad italiana de Udine, un viaje extra?o y complicado desde Italia a Gal¨ªcia -autocar de Udine a Trieste; avi¨®n de Trieste a Roma, sin comida programada en el aeropuerto; segundo vuelo de Roma a Madrid; breve escala en Barajas, y tercer avi¨®n hacia Santiago- no tiene muy contentos, que se diga, a los jugadores.