Inquietud en Polonia ante el aniversario de la firma de los acuerdos de Gdansk
En la ciudad portuaria polaca de Gdansk, se advierten s¨ªntomas de inquietud ante la proximidad del tercer aniversario de la firma de los acuerdos de Gdansk, que pusieron fin a la huelga de agosto de 1980 y llevaron al nacimiento del sindicato independiente Solidaridad, hoy prohibido. Ayer se cumpl¨ªa el ultim¨¢tum de la Solidaridad clandestina al Gobierno para iniciar el di¨¢logo con el l¨ªder sindical Lech Walesa. Desde la clandestinidad el sindicato amenaz¨® con huelgas de celo en los astilleros Lenin de Gdansk.
Lech Walesa, a la salida de los astilleros, dijo que ya se trabaja menos desde el pasado 13 de agosto y que supon¨ªa que el ritmo disminuy¨® m¨¢s ayer.Desde el exterior de los astilleros, no se pudo apreciar si hubo una disminuci¨®n en el ritmo de trabajo, pero el mismo Walesa reconoci¨® que los obreros no pueden dejar de trabajar completamente.
El dirigente sindical sali¨® de su turno de trabajo, que concluy¨® a las dos de la tarde, con un ramo de claveles rojos y blancos (los colores de Polonia) en la mano y se dirigi¨® a la casa parroquial de su padre espiritual, el p¨¢rroco de la iglesia de Santa Br¨ªgida, Henryk Jankowski.
Varios centenares de trabajadores de los astilleros Lenin se hab¨ªan congregado en las cercan¨ªas del monumento a las v¨ªctimas de la matanza de diciembre de 1970. Los reunidos se dispersaron sin incidentes al comprobar el dirigente sindical no llegaba.
Lech Walesa declar¨® que est¨¢ en contra de las manifestaciones, porque ponen en peligro a los mejores militantes del sindicato. Para el pr¨®ximo d¨ªa 31, aniversario de la firma de los acuerdos de Gdansk, el l¨ªder de Solidaridad anunci¨® que intentar¨¢ llevar un ramo de flores al monumento y pronunciar¨¢ unas palabras, si es posible.
En Varsovia ayer se daba como seguro que el viceprimer ministro, Mieczyslaw Rakowski, visitar¨¢ el astillero Lenin en Gdansk, el pr¨®ximo viernes. Walesa declar¨® que no est¨¢ dispuesto a hablar con Rakowski porque le injuri¨®. Tampoco parece que Rakowski est¨¦ muy interesado en dialogar con el l¨ªder del sindicato prohibido.
"Persona privada"
Los ¨²ltimos d¨ªas la Prensa del r¨¦gimen ha endurecido los ataques contra Walesa. En contra de la l¨ªnea mantenida durante varios meses, consistente en ignorarle y calificarle de "persona privada", el ¨®rgano oficial del comit¨¦ central del partido comunista (POPUP), Trybuna Ludu, ha atacado casi todos los d¨ªas a Walesa, a quien llama "el yanqui de Gdansk".El peri¨®dico del partido escribi¨® d¨ªas atr¨¢s que Walesa quiere que se mantengan. las sanciones norteamericanas contra Polonia, porque ¨¦l tiene los bolsillos llenos de d¨®lares procedentes de donativos de organizaciones pol¨ªticas del extranjero.
Ayer, Trybuna Ludu acus¨® al dirigente sindical de querer llevar a Polonia a "un suicidio colectivo" y a?adi¨® que su llamamiento a una huelga de trabajo lento significa que "r¨ªo ha aprendido la lecci¨®n".
En un concierto de musica pop, celebrado en la ciudad de Wroclaw, centenares de j¨®venes corearon el nombre del sindicato prohibido Solidaridad, al mismo tiempo que levantaban las manos para hacer con los dedos el signo de la victoria.
La manifestaci¨®n se disolvi¨® sin intervenci¨®n de la polic¨ªa. La proximidad del an¨ªversario de la firma de los acuerdos ha vuelto a traer la inquietud a Polonia.
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