"Despu¨¦s de Sagunto, nosotros"

Conscientes de la inevitabilidad de la reconversi¨®n, sindicatos y trabajadores levantan la bandera de la incertidumbre y piden que se hable el lenguaje humano de las alternativas. "Despu¨¦s de Sagunto, nosotros", dice, fatalista, un trabajador de Vulcano, a golpe de chapa. "De aqu¨ª no sale nadie sin que se plantee previamente un plan de salvaci¨®n para la comarca", afirma rotundo un joven sindicalista de Astano, en El Ferrol. En todo caso, no parece que la Administraci¨®n vaya a aplicar para la reconversi¨®n m¨¦todos traum¨¢ticos que provoquen la convulsi¨®n social en los dos principales n¨²cleos industriales de Galicia.Se llama Andr¨¦s Fern¨¢ndez. Tiene 35 a?os. Dos hijos. Vive en Fene y de los vecinos de su bloque de viviendas, todos trabajan en Astano menos tres: un marinero jubilado, un quiosquero y un practicante. Juega al f¨²tbol-sala en uno de los equipos de la empresa. Trabaja de siete de la ma?ana a dos de la tarde, tiene un cuatro latas, gana poco m¨¢s de 70.000 y los domingos, cuando hace buen tiempo, pasea con la familia por la playa de Valdovi?o o se van a Cedeira a pinchar unos chipirones. Su padre, tambi¨¦n trabajador de astillero, retirado, cultiva un huerto, yendo hacia Nar¨®n, y otro de sus hermanos, m¨¢s peque?o, trabaja en una contrata de Baz¨¢n. Estudi¨® primaria y bachillerato elemental. Estuvo tentado de hacer el superior por nocturno y luego apuntar se a Econ¨®micas en Santiago, pero el tiempo y las ¨²ltimas vicisitudes laborales no le animaron. Varios de sus compa?eros culminaron brillantemente ese reto y en los medios sindicales son llamados, con cierto cari?o, la, "escuela de economistas de Astano", aunque muchos sigan haciendo callo en las manos.

Este retrato-robot, uno de los posibles entre el personal de Astano, se va trazando con sugerencias de miembros del propio comit¨¦ de empresa. Este trabajador medio, pregunta el periodista, ?se interesa por la literatura? Hay un momento de silencio y Juan Filgueira, que a los 30 a?os lleva la mitad de su vida trabajando en Astano, apunta socarr¨®n: "Deber¨ªa estar leyendo el Libro Blanco". El voluminoso estudio que contiene las l¨ªneas maestras de la reconversi¨®n industrial en Espa?a, cuyo primer-episodio m¨¢s pol¨¦mico fue Sagunto, ocupa ciertamente todas las carpetas de los sindicalistas ferrolanos y de sus compa?eros vigueses. En el apartado de la construcci¨®n naval hay un p¨¢rrafo subrayado con especial ¨¦nfasis: "La disminuci¨®n de la producci¨®n traer¨¢ como consecuencia un mayor excedente en el empleo, con la posibilidad de cierre de alguna factor¨ªa". La amenaza de apocalipsis podr¨ªa generar el p¨¢nico en una comarca que en gran medida vive con la savia de Astano, y en la que el paro galopa con ¨ªndices sin precedentes. Pero El Ferrol, cuna del movimiento obrero gallego, sostiene la crispaci¨®n con madurez y traduce la incertidumbre en demandas de futuro. Las centrales sindicales formulan un¨¢nimemente una cuesti¨®n de principio: "No aceptaremos ninguna rescisi¨®n de contrato sin empleo alternativo".

La Administraci¨®n es tajante: sin reducci¨®n de plantilIas es inviable la reconversi¨®n. Fuentes oficiosas, a la espera de que con el oto?o se den a conocer los planes concretos, cifran entre 2.000 y 2.500 los puestos de trabajo afectados en Astano. En las previsiones de 1982 se hablaba de un excedente de empleo de 4.223 personas en los dos grandes astilleros (AESA y Astano), pero Ia desfavorable evoluci¨®n de la demanda" y otros factores obligar¨ªan a planteamientos m¨¢s dr¨¢sticos. Para ilustrar la magnitud del reto se cita el balance reconversor de la industria de la construcci¨®n naval brit¨¢nica: 700 millones de libras desde 1979 para cobertura de p¨¦rdidas m¨¢s de 24.000 puestos de trabajo perdidos y el cierre de 35 gradas y 10 astilleros.

Los trabajadores piensan de otra manera: "Nosotros ya estamos pagando la crisis; desde 1977, Astano ha perdido m¨¢s de 1.000 puestos de trabajo, sin contar los 3.500 de las compa?¨ªas auxiliares". Y a?aden: "Aunque nosotros no conocemos la auditor¨ªa, Juli¨¢n Masa ha afirmado que en los grandes astilleros, en el ejercicio de 1982, se perdieron 24.000 millones de pesetas, pero lo que hay que decir es que 15.000 se corresponden a gastos financieros y ¨²nicamente 8.000 al excedente; adem¨¢s, en ese mismo ejercicio, se trabaj¨® con plena ocupaci¨®n de la plantilla y consumiendo muchos cientos de miles de horas extraordinarias. Es hora ya de que se analicen otros aspectos, como, por ejemplo, la mal¨ªsima gesti¨®n de los astilleros" Siempre seg¨²n la versi¨®n del comit¨¦, "se han perdido contratos por incapacidad de la direcci¨®n, que por cierto, no ha variado a pesar del cambio pol¨ªtico, y se han hecho gastos suntuosos en una situaci¨®n de crisis".

Traves¨ªa y naufragio

Ese gigante naval que hoy se tambalea era en 1941 un peque?o astillero donde se armaban botes o, todo lo m¨¢s, pesqueros de 30 metros de eslora. El boom de Astano fue de los que hacen ¨¦poca. En 1944 se transforma en sociedad an¨®nima, comienza a ser un contrapunto de la tradicional Baz¨¢n y en 1963 tiene un capital de 1.000 millones de pesetas. El cierre del canal de Suez, con la construcci¨®n de mastod¨®nticos petroleros, marca la cima de El dorado, pero tambi¨¦n obliga a una fuga hacia adelante que bordea la cat¨¢strofe. Interviene el INI, aliger¨¢ndose el Grupo Pastor de tan pesada carga, y desde entonces las palabras crisis y reestructuraci¨®n se van adue?ando del l¨¦xico de informes.

El desplome de las compa?¨ªas auxiliares, con un largo conflicto en el que se denunciaron formas de mercado negro, marc¨® el punto de inflexi¨®n. Era el naufragio y los trabajadores pidieron algo m¨¢s que parches para atajar las v¨ªas de agua. El 15 de abril de 1980 hay una huelga general en El Ferrol y m¨¢s de 20.000 personas se concentran en el estadio Manuel Rivera. Desde entonces, sale a la calle el lema: "Salvar El Ferrol".

Ahora, todos apuestan por un oto?o caliente. "La situaci¨®n", dicen en CC OO, "se ha ido agravando por el incumplimiento de los acuerdos navales anteriores; al final, la f¨®rmula cabal¨ªstica parece ser siempre la misma: reducci¨®n de plantillas. Nadie se acuerda de, la reindustrializaci¨®n". Son esta central, mayoritaria en Astano, y la nacionalista INTG, las que se oponen con m¨¢s firmeza a unos planes que supongan p¨¦rdida de empleo. Seg¨²n UGT, "s¨®lo el Gobierno socialista puede sacar al sector naval del atolladero en que se encuentra, aunque para nosotros una cuesti¨®n prioritaria es que no puede haber reconversi¨®n sin industrializaci¨®n". En el comit¨¦, tambi¨¦n est¨¢ representada USO.

Astano el el centro de atenci¨®n, pero sin eclipsar otra realidad conflictiva: los cinco astilleros, peque?os y medianos, de la r¨ªa de Vigo. Entre Asc¨®n, Vulcano, Barreras, Freire y Santo Domingo suman unos 4.960 trabajadores, con perspectivas distintas en' cada empresa, siendo la m¨¢s cr¨ªtica la de Asc¨®n, donde la casi totalidad de la plantilla est¨¢ sometida a un expediente de regulaci¨®n, situaci¨®n en la que tambi¨¦n se encuentra el 45% de los trabajadores de Vulcano. En Asc¨®n se ha hablado con insistencia de nacionalizaci¨®n, pedida incluso por la Xunta y el Parlamento gallego. Propiedad de Slinin, esta empresa, que emplea a 1.674 operarios, se encuentra en un aparente callej¨®n sin salida.

La dif¨ªcil situaci¨®n. por la que tambi¨¦n pasa Vulcano, con m¨¢s de 700 operarios, parece haber adelantado los planes para una fusi¨®n de este. astillero con Barreras, que supondr¨ªa la constituci¨®n de la Constructora Naval de Vigo. Barreras, del INI, est¨¢ actualmente en fase de reestructuraci¨®n, desdoblando, en el futuro, astillero y factor¨ªa de motores navales, este ¨²ltimo proyecto en colaboraci¨®n con la firma alemana Deutz.

Los dos astilleros peque?os, Freire y Santo Domingo, viven un momento menos incierto, que puede llegar a boyante si se refuerza la especializaci¨®n en construcci¨®n de pesqueros para el extranjero.

Dos comarcas en apuros

Los astilleros de Astano y la r¨ªa de Vigo son hoy la punta del iceberg del desmantelamiento y la depauperaci¨®n que afecta a las dos comarcas m¨¢s industrializadas de Galicia. En un pa¨ªs que tradicionalmente ha desviado los excedentes humanos por el camino corto y dram¨¢tico de la emigraci¨®n, la aparici¨®n de datos como los 17.000 parados de El Ferrol o las 21 empresas cerradas en poco tiempo en Vigo son signos de grave preocupaci¨®n.

El plan estrat¨¦gico elaborado por la Divisi¨®n de Construcci¨®n Naval del INI contiene, entre otras medidas, "la creaci¨®n de una agencia de promoci¨®n de empleo para que, en colaboraci¨®n con las sociedades de reconversi¨®n, de las comunidades aut¨®nomas y de las sociedades de desarrollo regional y con participaci¨®n de las centrales sindicales, desarrollan y promueven la creaci¨®n e implantaci¨®n de empresas que puedan absorber personal excedente".

Esas medidas terap¨¦uticas, de largo alcance, con aliento de futuro, son las que demandan en El Ferrol y Vigo. Dif¨ªcil reto, no obstante, contrarrestar el escepticismo ambiental de los que, por experiencia, esperan lo peor.