El presidente apoya a la policía
El gesto de pedirnos perdón, porque a veces no se nos comprende, le honra, se?or presidente. Denota honestidad, inteligencia política y oportunidad. En tales términos se dirigió a la policía, precisamente en el Día del Patrón y tras un enfrentamiento producido poco antes. Y, para dar ejemplo, en presencia de varios miembros del Gobierno y de todas las autoridades del Ministerio del Interior.Efectivamente, no se comprende a la policía con frecuencia, y en especial cuando se ha liquidado un régimen autoritario de derechas, y se piensa que la policía, mayoritariamente, es de ideología conservadora o liberal. Pero esto ocurre en todos los países de Occidente, en donde se encuentran las democracias más arraigadas. Las democracias, no obstante, implican la existencia de ciudadanos y Gobiernos de izquierda, centro y derecha. Y la adscripción a una determinada línea de pensamiento político (cuando no es radical) no supone abandono, en una institución, de los deberes profesionales.
Creemos que la policía ha sido modelo en la transición política, aceptando siempre la nueva normativa en la primera fase de la transición y, posteriormente, la Constitución y las leyes que la van desarrollando. Fue leal con el antiguo régimen, leal con el Gobierno de UCD y, ahora, leal con el Gobierno socialista.
La lealtad es, pues, una de las más destacadas virtudes de esta corporación. A la lealtad va unida, en todo caso, la profesionalidad, que pretende, de continuo, la eficacia. Y ello, a pesar de que no se satisfacen justas reivindicaciones de variada índole, de que no se ha potenciado debidamente un gabinete de prensa que vele por nuestra imagen, de que no exista aún la adecuada asistencia jurídica a sus integrantes, de que nos falten medios técnicos y locales idóneos y de que algunos medios de comunicación no cesen en sus permanentes ataques y ofensas.
Hay en la policía, se?or presidente, una idea fija y obsesiva: servir mejor a la sociedad. Y que conozcan los ciudadanos nuestros sacrificios, riesgos, entrega y, en definitiva, nuestra profesionalidad. Como usted bien decía, se?or presidente, no se trata de lograr, de esta forma, el agradecimiento de los ciudadanos honrados (una mayoría), sino, simplemente, que no es poco, un reconocimiento a nuestra obligada pero dura y honrosa misión.
Gracias, se?or presidente, por su presencia en el gran acto político y policial del día 1, por sus palabras de reconocimiento y comprensión, por su estímulo a nuestra diaria labor y por el cari?o que, según se desprende de tales palabras, siente hacia nuestro cuerpo.
Le está hablando un comisario del Cuerpo Superior de Policía Joven. Hijo y nieto de comisarios. Las tres generaciones, desde hace ya 80 a?os, y con absoluta entrega, han servido a la sociedad espa?ola. Siempre con total lealtad: a la Monarquía, a la dictadura de Primo de Rivera, a la República, al régimen de Franco, a los Gobiernos de la transición política y, dentro de la nueva Monarquía, al Gobierno socialista. Así es la policía. El día 1, precisamente, mi padre, jubilado, lloró en el Centro Cultural de la Villa al serle entregada la Cruz Roja al Mérito Policial y recibir un fuerte y sincero apretón de manos de nuestro presidente del Gobierno.
Esta es la policía espa?ola, se?or presidente.
Comisario del Cuerpo Superior de Policía.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás a?adir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.