Los bancos y cajas de ahorro tendr¨¢n que someterse a auditor¨ªas m¨¢s completas que las actuales
Las instituciones financieras tendr¨¢n que someterse a una auditor¨ªa mucho m¨¢s exhaustiva de lo que vienen haci¨¦ndolo hasta ahora. Seg¨²n las nuevas directrices que van llegando a los bancos y cajas de ahorro, las autoridades monetarias quieren que se les presente, en tres a?os, la auditor¨ªa de la cuenta de resultados, el balance consolidado de la entidad y el an¨¢lisis de la inversi¨®n crediticia que realicen. El Banco de Espa?a ha mantenido en los ¨²ltimos meses reuniones colectivas e individuales con las auditoras para que vayan unificando los criterios de los informes, de forma tal que se sepa lo que se quiere decir cuando se emite el informe y cuando se anotan las salvedades que realiza cada firma a la entidad auditada.
El Banco de Espa?a, visto que con recomendaciones directas y con presiones m¨¢s o menos fuertes ha logrado que los bancos y cajas de ahorro inicien la pr¨¢ctica de someterse a una auditor¨ªa externa de su cuenta de resultados, parece dispuesto a apretar una tuerca m¨¢s en el control a ejercer sobre el funcionamiento de estas instituciones financieras y se pone como objetivo que en el plazo de tres a?os se audite, no s¨®lo la cuenta de resultados, sino tambi¨¦n el balance consolidado, y se haga un an¨¢lisis de la inversi¨®n. Este ¨²ltimo se har¨¢ mediante un examen exhaustivo de los grandes cr¨¦ditos concedidos por las instituciones financieras y mediante un muestreo sobre el resto.
Conformidad de las auditor¨ªas
Las empresas que se dedican a realizar auditor¨ªas han manifestado estar de acuerdo con estas directrices del Banco de Espa?a, toda vez que ello permite obtener un conocimiento m¨¢s profundo de la situaci¨®n real de las empresas y porque, adem¨¢s, les supone un incremento importante de su cifra de negocios, al encarecerse los trabajos que realicen por ser m¨¢s complejos. La ¨²nica pega que ponen es que ellos realizan un trabajo por encargo de las empresas financieras y que deben ser ellas las que les soliciten que ampl¨ªen el volumen del trabajo a desarrollar. Por ello consideran que debe ser el Banco de Espa?a quien convenza a las entidades financieras para que soliciten algo m¨¢s que el estudio de la cuenta de resultados.Las diferencias de criterios que se han manifestado en los ¨²ltimos tiempos sobre el valor real de los informes presentados por las empresas auditoras han provocado que sobre un mismo dictamen se pueda decir que es limpio -que la solvencia de la entidad est¨¢ garantizada- o pr¨¢cticamente lo contrario. Estas discrepancias han provocado que el Banco de Espa?a realizara reuniones generales con las empresas de auditor¨ªa, y otras individualizadas con algunas, para conseguir que los textos de los informes se acerquen lo m¨¢s posible entre s¨ª y quede claro qu¨¦ es lo que se quiere decir en cada ocasi¨®n. De esta forma no habr¨¢ posibilidad de que se interprete de forma distinta el dictamen corto que presentan las empresas auditoras.
Dentro de su pol¨ªtica de estrechar al m¨¢ximo el margen de posibles encubrimientos contables, el Banco de Espa?a estudia recomendar tambi¨¦n, no s¨®lo la ampliaci¨®n de la auditor¨ªa, sino que, como se hace en algunos otros pa¨ªses, las empresas auditoras elaboren un informe largo, complementario del que actualmente realizan, en el que se exponga claramente la impresi¨®n que para dichas empresas especializadas merece la situaci¨®n analizada de los bancos y cajas de ahorro.
Los criterios que deben regir para este informe largo ser¨¢n fijados durante el a?o pr¨®ximo para el conjunto de empresas auditoras. La f¨®rmula de presi¨®n que el Banco de Espa?a puede ejercer para que se ponga en marcha la realizaci¨®n de este nuevo informe viene por el control sobre los bancos y cajas de ahorro y por la posibilidad que tiene para aceptar o no los estudios que realicen las empresas especializadas.
La sombra de un registro espec¨ªfico de firmas auditoras para bancos y cajas de ahorro en el Banco de Espa?a condicionar¨¢ que estas empresas acepten las condiciones fijadas por la autoridad monetaria.
En cualquier caso, se mantiene la idea de que este informe largo, t¨¦cnicamente m¨¢s complejo y con mayores explicaciones sobre determinadas partidas y operaciones, no ser¨ªa hecho p¨²blico necesariamente, sino que ser¨ªa suministrado a las autoridades monetarias.
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