Exped¨ªciones a todos los continentes

Vamos a salir sin m¨¢s- bagaje que nuestras personas y en grupo de muchos amigos a la b¨²squeda del reino de Dios en este mundo, o sea, la fraternidad compartidora y promocionadora.La expedici¨®n va a resultar apasionante como un nuevo viaje a Itaca, que es la versi¨®n actual de tant os ¨¦xod¨®s como todos los pueblos han intentado en busca de la tierra prometida.

Nuestra tierra prometida, tras la cual vamos, es cambiar las situaciones injustas de este mundo. Vamos a hacer un mundo m¨¢s amable, m¨¢s humano, de rostro m¨¢s ilusionado. No hay otro procedimiento para cambiar el mundo que llenar un pueblo de peque?os grupos con vencidos y concienci adores. La mayor desgracia de una idea ser¨ªa que triunfase prematuramente. Ser¨ªa como flor de un d¨ªa. De un partido pol¨ªtico que gane unas elecciones o una guerra. Lo impor tante no es mandar, sino crear, fecundar. S¨®lo se fecunda en el mis terio y en la intimidad. En la intimidad del misterio. Vamos a salir a la b¨²squeda del reino de, Dios, que es la promoci¨®n de los pobres y marginados. De momento hay expediciones que se preparan para caminar -a trav¨¦s del desierto hasta el coraz¨®n de ?frica. All¨ª hay infinidad de pueblos y aldeas que no tienen escuelas ni fuent e de agua potable, ni saben trabajar sus tierras f¨¦rtiles. Llevamos cada uno una azada y una pala. Intentamos crear fraternidades de j¨®venes y de familias espa?olas y bant¨²es. Trabajaremos juntos. Romperemos el n1aleficio de la marginacion juntos.Otras expediciones se preparan para atravesar el Atl¨¢ntico, si es preciso, en barca, hasta llegar a los indios de Centroam¨¦rica y de Suram¨¦rica. Siguen aislados, condicionados. Vamos a descubrirlos definitivamente. Queremos crear fraternidades de indios y espa?oles a fin de promocionarnos juntos. Vamos a romper el maleficicio de la pereza juntos.Otros prefieren tomar el caminode Europa. Hemos de llenar Europa, nuestra vieja, y siempre joven Europa, de fraternidades humanas capaces de hacernos caer en la cuenta de que somos unos irresponsables exportando armas en vez de cultura y provocando guerras en vez de promoci¨®n. Europa ha perdido la br¨²jula y se ha desviado de su camino. La ¨²nica manera de hacer vob. ver a Europa al camino de su mi si¨®n hist¨®rica es llenarla de peque ?os grupos de obreros, de campe sinos y de universitarios- dispues tos a acabar con las guerras a promocionar la paz a fuerza de ra z¨®n, de fe y de esperanza. Desde sus peque?os grupos. /