Reagan present¨® la invasi¨®n de Granada como un "freno al expansionismo sovi¨¦tico-cubano" en Latinoam¨¦rica

La invasi¨®n de Granada y la continuidad de los marines en Beirut fueron presentadas en la madrugada del viernes por el presidente norteamericano, Ronald Reagan, como una "filosof¨ªa" global de la Administraci¨®n de EE UU en su af¨¢n de "frenar" la expansi¨®n de la influencia sovi¨¦tica en el mundo. Pero la opini¨®n p¨²blica estadounidense contin¨²a dividida sobre la necesidad de contar o no con una pol¨ªtica exterior que comporte una escalada de la presencia militar de EE UU en el mundo. Por otra parte, Washington qued¨® pr¨¢cticamente aislado al vetar en el Consejo de Seguridad de la ONU la resoluci¨®n que "deplora la intervenci¨®n en Granada" y pide "la retirada inmediata de las tropas extranjeras".

La resoluci¨®n, haciendo gala de la diplomacia propia de las Naciones Unidas, no cita en ning¨²n p¨¢rrafo a Estados Unidos como protagonista de la invasi¨®n. 11 pa¨ªses votaron a favor de la resoluci¨®n y tres se abstuvieron (Reino Unido, Togo y Zaire).Tambi¨¦n el Senado norteamericano aprob¨® una resoluci¨®n que obliga al presidente a retirar las tropas de Granada en un plazo de 60 d¨ªas.

Reagan present¨® a la opini¨®n p¨²blica una panor¨¢mica de Granada como "colonia sovi¨¦tico-cubana" y no como "una isla paradis¨ªaca". Cit¨®, sin dar su cifra exacta, a "centenares de consejeros militares cubanos" que preparaban a la isla como una base militar en Latinoam¨¦rica. Pero Reagan argument¨® que "EE UU actu¨® a tiempo", para "prevenir otra Angola", donde unos 25.000 militares cubanos apoyan a las guerrillas contra ?frica del Sur.

Reagan describi¨® el porqu¨¦ de la presencia militar de EE UU en Granada, "donde las tropas ser¨¢n retiradas lo antes posible", y en L¨ªbano, "donde continuar¨¢ nuestra misi¨®n pacificadora". En ambos casos, analizados en 15 minutos cada uno a lo largo de media hora de alocuci¨®n televisada en la noche del pasado jueves, Reagan ofreci¨® explicaciones con trasfondo de choque de intereses entre: las dos grandes potencias: Granada como "base del expansionismo sovi¨¦tico" en Latinoam¨¦rica, y L¨ªbano como dese¨® de desestabilizar un Gobierno, colocando en peligro los intereses de Occidente en la zona de Oriente Pr¨®ximo y la seguridad del Estado de Israel.

Aunque no hay v¨ªnculo oficial entre el atentado a los mar¨ªnes en Beirut y la invasi¨®n de Granada dos d¨ªas m¨¢s tarde, el sentimiento entre los americanos (2 a 1, seg¨²n los sondeos) es de victoria de EE UU despu¨¦s de la matanza, de Beirut, donde el pasado domingo murieron en un atentado m¨¢s de 200 marines. Las agencias de reclutamiento del Ej¨¦rcito -en un pa¨ªs sin servicio militar obligatorio- reciben m¨¢s peticiones que nunca.

Primera `victoria'

Granada, para los americanos, es la primera victoria militar desde la segunda guerra mundial. Para muchos, borra el trauma del fracaso de Vietnam. Para otros, al contrario, lo reaviva con interrogantes muy serios en torno a una pol¨ªtica exterior que necesita como correa de transmisi¨®n a la fuerza militar.Reagan, con voz firme y cara seria, intent¨® convencer a la naci¨®n a trav¨¦s de las c¨¢maras de televisi¨®n. Probablemente lo logr¨®, en t¨¦rminos globales, ante una opini¨®n p¨²blica impactada por el atentado de Beirut e intimidada por la amenaza comunista al sur de sus fronteras. Sin embargo, en la arena pol¨ªtica, las reacciones al discurso de Reagan son cr¨ªticas.