La alta competici¨®n ser¨¢ materia de Estado

La alta competici¨®n es materia de Estado. Este hecho supone la principal aportaci¨®n, al menos la m¨¢s sorprendente, del equipo que dirige Rom¨¢ Cuy¨¢s en el Consejo Superior de Deportes. El Estado prestar¨¢ m¨¢s atenci¨®n a la alta competici¨®n y aumentar¨¢ sus prestaciones para la promoci¨®n deportiva e instalaciones. Las federaciones tendr¨¢n casi 1.000 millones m¨¢s a repartir, pero parece que el dinero tendr¨¢ un destino prefijado o al menos consensuado. Tales hechos se desprenden de la pol¨ªtica anunciada por el Consejo Superior de Deportes (CSD) a trav¨¦s de sus 18.019 millones de presupuesto. Rom¨¤ Cuy¨¤s cifra su primer ¨¦xito en haber conseguido un incremento de 3.875 millones de pesetas para el deporte y una independencia de las quinielas.El CSD reclama la paternidad de este presupuesto. La pol¨ªtica deportiva que de ¨¦l se desprenda puede entenderse como suya y no heredada. Una innovaci¨®n es el nuevo rumbo que se concede al papel del Estado en la alta competici¨®n, desde una perspectiva. intervencionista ya anunciada por el secretario de Estado para el Deporte, Rom¨¤ Cuy¨¤s, en una conferencia celebrada en el Club Siglo XXI. Los atletas de elite, las selecciones nacionales y sus instalaciones ser¨¢n competencia del Estado en tanto en cuanto ¨¦ste las financie. La teor¨ªa se basa en que una selecci¨®n naciontal compite representando a Espa?a y su actuaci¨®n redunda en la imagen del pa¨ªs.
El CSD formar¨¢ un comit¨¦ conjunto con el Comit¨¦ Ol¨ªmpico Espa?ol para supervisar la alta competici¨®n. Pero el papel del CSD ser¨¢ exclusivo en dos materias nuevas: instalaciones propias, por valor de 974 millones en el a?o 1984, destinadas a la investigaci¨®n y al alto rendimiento, como las que existen en otros pa¨ªses europeos, e inversiones en instalaciones federativas. Esta partida, con un montante para el a?o que viene de 1.965 millones, supone la posibilidad de que el Estado asuma la construcci¨®n de instalaciones destinadas al espect¨¢culo deportivo y que no exist¨ªan en Espa?a. Un caso concreto podr¨ªa ser el relativo a la construcci¨®n de un estadio, insistente petici¨®n del presidente de la Federaci¨®n Espa?ola de Atletismo, Juan Manuel de Hoz. Dicho estadio ser¨ªa de titularidad p¨²blica y nunca pasar¨ªa a manos privadas, como era intenci¨®n del equipo anterior que regia el CSD. Como este caso pueden estimarse algunos m¨¢s relativos a otros deportes. Son 2.439 millones de pesetas que refuerzan el papel p¨²blico en este sector.
En un segundo t¨¦rmino, la pol¨ªtica del CSD aporta un incremento de las subvenciones al mundo federativo, dinero que supondr¨¢ importantes subidas en las partidas destinadas a cada federaci¨®n, con benefic¨ªo primordial para aquellas que sean declaradas de inter¨¦s especial, en un n¨²mero no superior a seis, y entre las que ya se encuentran el atletismo y el baloncesto y, probablemente, el f¨²tbol. Las federaciones deber¨¢n negociar programa por programa todos sus presupuestos. El CSD intentar¨¢ evitar as¨ª la inflaci¨®n de altos cargos y elevados sueldos que existe en el mundo federativo. El total dedicado a este cap¨ªtulo ser¨¢ de 4.216.256.000 pesetas.
Por su parte, el CSD realizar¨¢ una campa?a de deporte para todos, con televisi¨®n incluida, y cuyo valor es de 250 millones de pesetas. Se ¨ªntentar¨¢ ir a la elaboraci¨®n de un censo y de un plan para 20 a?os, seg¨²n el modelo auton¨®mico. Por ¨²ltimo, el CSD acabar¨¢ convirti¨¦ndose en un organismo de servicios, tender¨¢ a la informatizaci¨®n de departamentos y a un reciclaje de personal.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
?Tienes una suscripci¨®n de empresa? Accede aqu¨ª para contratar m¨¢s cuentas.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.