Israel impone fuertes restricciones internas a la adquisici¨®n de divisas
Los israel¨ªes s¨®lo pueden comprar desde ayer un m¨¢ximo de 3.000 d¨®lares o equivalente en otras divisas (unas 450.000 pesetas en moneda espa?ola), siempre que lo justifiquen con un billete de viaje o una factura para adquirir bienes y servicios en el extranjero.
Con esta medida, anunciada por el nuevo ministro de Finanzas, Igal Cohen Orgard, Israel volvi¨® al control de cambios y acab¨® con seis a?os de una libertad casi total. en el mercado de cambios, coincidente con la llegada al poder en 1977 del ex primer ministro Men¨¢jein Beguin.
El p¨²blico israel¨ª, a pesar de haberse reanudado las operaciones en la Bolsa de Tel Aviv, segu¨ªa comprando d¨®lares en efectivo como la forma m¨¢s segura de ahorrar, o de salvar sus ingresos ante una inflaci¨®n que este a?o puede llegar a m¨¢s del 200%.
Cohen Orgad dijo que la nueva disposici¨®n ser¨¢ "provisional, hasta que mejore la situaci¨®n". El ministro calcula que el p¨²blico "guarda en sus colchones entre 50 y 70 millones de d¨®lares (entre 7.500 y 10.500 millones de pesetas)".
La medida, elogiada por la asociaci¨®n de industriales, fomentar¨¢ las operaciones del mercado negro en Tel Aviv, Jerusal¨¦n y la ciudad ¨¢rabe de Gaza.
Miles de ahorradores israel¨ªes perdieron en las ¨²ltimas dos semanas, por tener su dinero en acciones bancarias, unos 2.000 millones de d¨®lares.
Muchos, despu¨¦s de perder hasta un 40% de su valor, las vendieron en la bolsa para comprar d¨®lares en efectivo con el dinero que les qued¨®.
"Este es el ¨²ltimo clavo en el f¨¦retro de la econom¨ªa correcta de este Gobierno", declar¨® ayer Gad Yacobi, diputado de la oposici¨®n laborista.
P¨¦rdida de confianza
Y prosigui¨®: "La base de la crisis est¨¢ en que el pueblo perdi¨® la confianza, pues quienes hicieron caso al Gobierno perdieron, y ganaron los que desconfiaron de su pol¨ªtica econ¨®mica".El israel¨ª es el ciudadano que m¨¢s impuestos paga por lo que produce en el mundo: un 57% de sus ingresos se los llevan, directa o indirectamente, el Estado y el ayuntamiento.
La prohibici¨®n de adquirir fibremente divisas extranjeras en los bancos es una de las primeras medidas del plan econ¨®mico que est¨¢ preparando el ministro de Finanzas Cohen Orgad, que pretende conseguir un pacto econ¨®mico y social con la Histradrut, la confederaci¨®n de trabajadores, controlada por los laboristas.
Cohen Orgad advirti¨® que los de mayores ingresos ser¨¢n los que m¨¢s tendr¨¢n que aportar para sanear la econom¨ªa israel¨ª, bloqueada por una deuda externa de 21.500 millones de d¨®lares (unos 3,2 billones de pesetas) para 4.065.000 habitantes.
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