La reuni¨®n hispano-portuguesa ha sido un ¡°paso hist¨®rico¡±, afirma Felipe Gonz¨¢lez

El presidente del Gobierno espa?ol, Felipe Gonz¨¢lez, dijo ayer a su regreso de la cumbre hispano-portuguesa celebrada en Lisboa que los dos pa¨ªses ¡°vamos a seguir soportando todav¨ªa por mucho tiempo a los enemigos de que exista una buena relaci¨®n bilateral, aunque eso no sirva a los verdaderos intereses de las dos naciones¡±. El presidente espa?ol a?adi¨® que ese no es el caso del actual Gobierno portugu¨¦s, y a?adi¨® que el hecho de que se haya celebrado esta cumbre ¡°es ya un paso hist¨®rico¡± sin precedentes en 300 a?os.

Para Felipe Gonz¨¢lez, las relaciones hispano-lusas "son dif¨ªciles", por las razones de desequilibrio que existen, sobre todo en el terreno econ¨®mico y comercial, y en el de los problemas estructurales del poco desarrollo portugu¨¦s en comparaci¨®n con Espa?a. "Pero, aunque no se pueda cuantificar esta cumbre, si bien yo creo que tambi¨¦n es posible, el hecho de que se haya celebrado es ya un paso hist¨®rico que no tiene precedentes en 300 a?os de historia", a?adi¨®."Lo que ocurre es que mi Gobierno llama siempre a los problemas por su nombre, aun a riesgo de que eso sea calificado a veces de ingenuidad, y, aunque no deseo lanzar las campanas al vuelo, creo que en las relaciones vecinales se han dado pasos importantes", manifest¨® Felipe Gonz¨¢lez en la conferencia de prensa que ofreci¨® ayer a su llegada a Barajas.

En un tono de comprensi¨®n que ha mantenido en Lisboa y que utiliz¨® de nuevo ayer en Madrid, el jefe del Ejecutivo espa?ol se?al¨® que en la cuesti¨®n pesquera Portugal desea aprovecharse ahora del nuevo derecho del mar, que concede la exclusividad de pesca a una naci¨®n entre las 6 y las 12 millas de sus aguas jurisdiccionales. Frente a eso est¨¢ el acuerdo de 1969 con Espa?a, que autoriza a los pescadores espa?oles a faenar dentro de esos l¨ªmites. "Creo que si el tema se plantea pol¨ªticamente, la soluci¨®n es dif¨ªcil, porque mi Gobierno tiene que defender los intereses espa?oles, pero si nos lo planteamos en el terreno econ¨®mico y sin condiciones previas, la cooperaci¨®n y comercializaci¨®n del producto ser¨ªa ventajosa para ambas partes", dijo Felipe Gonz¨¢lez.

Hasta diciembre

En la cumbre de Lisboa, las dos delegaciones se han fijado un plazo hasta diciembre para explorar las v¨ªas de entendimiento en este terreno y conseguir que en 1984 los cigaleros espa?oles puedan volver a faenar como antes. Tambi¨¦n se tendr¨¢n que resolver los "arreglos espec¨ªficos para las zonas fronterizas ribere?as", donde los portugueses no aceptan por ahora las propuestas espa?olas de seis millas exclusivas a ambas riberas de la desembocadura del Mi?o, y de cuatro millas en el caso de la del Guadiana.En el terreno comercial, la propuesta a negociar es que Portugal abra la mano en la concesi¨®n de licencias a importaciones de Espa?a, que ahora est¨¢n bloqueadas a millares y, a cambio, Espa?a acepte un compromiso transitorio para dar mayores facilidades a las exportaciones portuguesas a nuestro pa¨ªs entre 1984 y 1986, en el marco del acuerdo que en su momento firmaron con la Asociaci¨®n Europea de Libre Comercio (EFTA) y que tiene vigencia hasta 1988. Esto ayudar¨ªa a las dos naciones, en el caso de que entren en el Mercado Com¨²n, a ajustar sus situaciones comerciales a la relaci¨®n comunitaria.

Felipe Gonz¨¢lez sugiri¨® ir m¨¢s all¨¢, utilizando la f¨®rmula de los Pa¨ªses Escandinavos o la del Benelux en sus or¨ªgenes, pero la idea fue rechazada por los portugueses.