Juan de la Sierra afirma que jam¨¢s oy¨® decir a su padre que iba a dejar su fortuna a una fundaci¨®n
"Los papeles de la Fundaci¨®n Urquijo s¨®lo los vi cuando puse mi firma en ellos, hace unos cuatro a?os; pero jam¨¢s o¨ª a mi padre decir que iba a incrementar la dotaci¨®n. De ninguna manera esto puede ser cierto". Juan de la Sierra realiz¨® ¨¦sta tajante manifestaci¨®n a EL PAIS, tras leer el ¨²ltimo n¨²mero de la revista Intervi¨² en su apartamento del barrio de las Tres Torres, en Barcelona. El primog¨¦nito de los marqueses de Urquijo explic¨® adem¨¢s que en los ¨²ltimos d¨ªas ha le¨ªdo declaraciones, como la de Mauricio L¨®pez Robert, que Intentan mezclar todo tipo de cosas para confundir a La opini¨®n p¨²blica y a la propia investigaci¨®n judicial".
Juan de la Sierra, licenciado en Derecho, est¨¢ acabando un master en Barcelona, curso que inici¨® en la American Graduate School of International Management de Thunderbird, en el estado de Arizona. Vive en un apartamento de unos 60 metros cuadrados, situado en la parte alta de la ciudad, donde le acompa?an unos libros, un peque?o equipo de m¨²sica y unas fotos familiares. La mayor parte del tiempo lo pasa estudiando -"el curso es muy duro"- aunque de vez en cuando le queda tiempo para tomar una copa con los compa?eros de clase. Barcelona le permite adem¨¢s pasar desapercibido y en esta ciudad asegura que recibe un trato muy amable de sus colegas. Disfruta de una excedencia del banco, que concluye dentro de un a?o aproximadamente, donde ocupaba el puesto de analista financiero.La revista Intervi¨², dice que el m¨®vil del doble crimen ser¨ªa la Fundaci¨®n Urquijo, que el marqu¨¦s habr¨ªa querido dotar con 500 millones de pesetas, unos 200 procedentes de la liquidaci¨®n del patrimonio familiar en el Pa¨ªs Vasco y el resto, de los negocios en Panam¨¢ de la familia. De esta forma, pr¨¢cticamente habr¨ªa desheredado a sus hijos, Juan y Miriam.
Juan de Sierra afirm¨® que la fundaci¨®n es un patronato que inici¨® su tatarabuelo, con una asignaci¨®n de 1.350.000 pesetas, destinada a becar a los mejores estudiantes de una escuela de Llodio. "Los fines del patronato son exclusivamente ¨¦stos, por lo cual no pod¨ªa haber ninguna raz¨®n para incrementar la dotaci¨®n". Sobre la liquidaci¨®n de los bienes del Pa¨ªs Vasco asegur¨® que "sirvieron para pagar la construcci¨®n del chal¨¦ de Somosaguas y para comprar acciones del Urquijo".
Los 'negocios' de Panam¨¢
Acerca de los negocios d¨¦ los Urquijo en Panam¨¢, con los que habr¨ªa obtenido, seg¨²n la versi¨®n de la revista, la cantidad hasta completar los 500 millones para la fundaci¨®n, Juan de la Sierra dijo que son pura "fantas¨ªa". "Es cierto, como dice esta publicaci¨®n, que hab¨ªa ido algunas veces a Panam¨¢ acompa?ando a mi padre. ?l era consejero de Aseguradora Mundial, cargo al que hab¨ªa llegado por ser vicepresidente de Seguros La Estrella, que a su vez le correspond¨ªa por su puesto en el banco. Sin embargo, Aseguradora Mundial, a pesar de su nombre espectacular, es una entidad peque?a, por la que mi padre recib¨ªa una asignaci¨®n de mil y pico de d¨®lares cuando asist¨ªa a la junta, una vez al a?o. Yo ocup¨¦ el puesto de consejero a la muerte de mi padre por deferencia de la compa?¨ªa. Pero es falso que posea all¨ª cuentas corrientes y negocios".Asimismo, el hijo de los marqueses asesinados desminti¨® que visitara al jefe del servicio de Fundaciones del Ministerio de Educaci¨®n, Carlos Aguilera, -"No he pisado en mi vida el ministerio y, aunque soy muy despistado jurar¨ªa que no he visto a este caballero en mi vida"- y que tuviera negocios con el administrador de la familia, Diego Mart¨ªnez Herrera, a trav¨¦s de la empresa Intermercados, que detenta ¨¦ste.
"Nadie nos amenaz¨®"
Juan de la Sierra est¨¢ indignado por las declaraciones de Mauricio L¨®pez Robert al juez en las que le acusaba de inductor del doble asesinato. Preguntado al respecto, se?al¨® que L¨®pez Robert "algo puede haber aportado al caso, aunque podr¨ªa estar desviando el nivel de responsabilidad". Manifest¨® que ni Miriam ni ¨¦l han sido llamados a declarar, que es una solemne tonter¨ªa que le vieran con Rafael Escobedo llorando juntos tras los hechos y que "espero que se llegue a saber toda la verdad, aunque pienso que todav¨ªa leeremos historias muy incre¨ªbles". T-;-i tambi¨¦n que retiraron la acusac¨ª¨®n privada por razones personales y no por ninguna amenaza, pero que volvieron a ella por consejo de los abogados, a fin de seguir el curso de los acontecimientos, al tener acceso al sumario: De Rafl Escobedo, su cu?ado, Juan de la.Sierra se limit¨® a se?alar: 'Las cosas que dice no tienen ni pies ni cabeza. Si ten¨ªa algo que aportar, lo l¨®gico era hacerlo en el juicio. O en el careo, al que ' no acudi¨®. Todo, antes que a una revista".
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