Una mano tendida a los prosovi¨¦ticos

., Una de las labores de pasillo m¨¢s ocultas y desconocidas de cuantas, de una u otra manera, se realizan en este congreso del PCE consiste en la serie de conversaciones que, en resumen, podr¨ªan calificarse como "mano tendida a los prosovi¨¦ticos". Una figura clave en esta operaci¨®n parece ser el secretario general de CC OO del Campo, el andaluz Juan Antonio Romero, que, trata as¨ª de desvirtuar los intentos protagonizados por Ignacio Gallego para crear un nuevo partido "de unificaci¨®n comunista" no lejano a Mosc¨².

Un peque?o sector de los delegados asistentes al congreso ve con simpat¨ªa incluso la idea de incluir a Gallego -quien no ha abandonado formalmente el PCE- en la lista oficial de candidatos al nuevo Comit¨¦ Central.

El propio Santiago Carrillo, en su intervenci¨®n de ayer, expres¨® su deseo de cerrar la puerta a los 'liquidacionistas del partido" (a los renovadores expulsados por el propio Carrillo) y abrirla, en cambio, a los integrantes del Partido de los Comunistas de Catalu?a, de tendencia prosovi¨¦tica. Y el gerarlista Felipe Alcaraz, secretario ge,leral de la poderosa organizaci¨®n le Andaluc¨ªa, dijo ayer que "en el partido caben todos, y cabe Ignacio Gallego, si se decide a volver, cosa a la que le llamo desde aqu¨ª".

Los partidarios de esta "mano tendida a los prosovi¨¦ticos" argumentan que, al fin y al cabo, el propio Partido Comunista Italiano hizo su unidad contando en su seno con una fracci¨®n muy minoritaria pr¨®xima a las tesis del partilo comunista sovi¨¦tico.