Ciudadanos espa?oles viven en condiciones infrahumanas en prisiones de Tailandia

El diputado del Grupo Popular por Valencia Manuel Gallent, perteneciente al PDP (Partido Dem¨®crata Popular), ha formulado una pregunta parlamentaria al Gobierno en la que denuncia que los ciudadanos espa?oles que se encuentran encarcelados en Tailandia permanecen en condiciones infrahumanas, sin que la Embajada de Espa?a en aquel pa¨ªs haga nada por intentar auxiliarles.Seg¨²n se?ala Gallent en su pregunta, la c¨¢rcel de Bangkuang alberga a varios presos de nacionalidad espa?ola con condenas de entre tres a?os y cadena perpetua. En la prisi¨®n "no existe agua potable, por lo que cada preso debe procurarse el agua para beber, ya que ingerir las aguas negras de que se dispone equivale a morir en el plazo de semanas, v¨ªctima de cualquier infecci¨®n".

El diputado indica que, a juicio del embajador holand¨¦s en Bangkok, la comida es de tales caracter¨ªsticas que en su pa¨ªs "ni los perros la comer¨ªan", por lo que los presos adquieren otros alimentos a precios muy altos. No hay asistencia sanitaria y conviven personas sanas con otras aquejadas de dolencias tan graves como lepra, malaria y tuberculosis.

Algunos de los presos espa?oles que se encuentran en Bangkuang "est¨¢n perdiendo, debido al r¨¦gimen a que se encuentran sometidos, la vista, el o¨ªdo y la dentadura". Adem¨¢s de ello, todos los presos est¨¢n atados con cadenas.

La mayor¨ªa de los detenidos en Tailandia, a?ade el diputado, son toxic¨®manos a quienes las autoridades sorprenden para intentar "justificar con ello la lucha antidroga de un pa¨ªs que produce decenas de toneladas anuales de hero¨ªna, desoyendo una vez tras otra las recomendaciones de los pa¨ªses occidentales, que piden la destrucci¨®n de las plantaciones de opio all¨ª existentes". En los ¨²ltimos cinco a?os han sido detenidos m¨¢s de 500 extranjeros y en algunos casos se les han impuesto condenas de 50 a?os de prisi¨®n por poseer 28 gramos de hero¨ªna.

Gallent pregunta al Gobierno si conoce que los juicios a los espa?oles detenidos en Tailandia se hacen en lengua tai, sin int¨¦rprete "y sin que la Embajada de Espa?a env¨ªe a alguno de sus funcionarios en su auxilio", as¨ª, como que las embajadas occidentales dan a sus ciudadanos detenidos 100 d¨®lares al mes para poder comprar agua potable y comida, excepto la de Espa?a, que es la ¨²nica que no ofrece ayuda alguna.

Cuando en agosto de 1981, siempre seg¨²n el texto de la pregunta, los presos extranjeros en Bangkuang realizaron una huelga de hambre, ello provoc¨® una visita de representantes de las respectivas embajadas, excepto la espa?ola. Adem¨¢s, "hay constancia en el Ministerio de Asuntos Exteriores de que nuestra Embajada en Tailandia no presta asistencia sanitaria a los ciudadanos espa?oles all¨ª prisioneros y que las medicinas son enviadas por las familias respectivas en Espa?a, a petici¨®n de los interesados, en cartas que tardan en recibirse".

Gallent pregunta concretamente si el Gobierno ha previsto los riesgos a que se exponen los numerosos turistas espa?oles, dada la arbitrariedad de la Administraci¨®n tailandesa y la corrupci¨®n imperante en aquel pa¨ªs.