"Las bases del partido han determinado la soluci¨®n del conflicto planteado por la direcci¨®n", afirma Garaikoetxea
Finalizado el conflicto que enfrent¨® a Carlos Garaikoetxea con la direcci¨®n del Partido Nacionalista Vasco (PNV), que quiso someterle a la disciplina partidaria, el presidente del Gobierno vasco est¨¢ convencido de que volver¨¢ a ganar las elecciones auton¨®micas. Garaikoetxea, que ser¨¢ cabeza de lista por el PNV en Guip¨²zcoa en los comicios, ha pasado las vacaciones de Navidad a caballo entre asambleas nacionales de su partido y viajes a Pamplona para visitar a su familia. Aunque en un principio estimaba que no era el momento para pronunciarse p¨²blicamente, accedi¨® ayer a conversar con EL PAIS. El lendakari asegura que han sido los propios afiliados del Partido Nacionalista Vasco quienes, al final, han determinado la soluci¨®n al conflicto planteado por la direcci¨®n de este mismo partido. Asimismo, insiste en que sigue obsesionado por sus preocupaciodes de siempre: sacar adelante Euskadi de su crisis econ¨®mica, aliviar la situaci¨®n de paro que afecta a tantas de nuestras gentes y lograr la paz.
Pregunta. Durante casi dos semanas, usted y la direcci¨®n del partido, que encabeza Xabier Arzallus, han acaparado la atenci¨®n de la opini¨®n p¨²blica, por su negativ a estar bajo la disciplina del PNV s¨ª resultaba reelegido lendakari. En realidad, ?qu¨¦ es lo que subyace detr¨¢s de esta pol¨¦mica?Respuesta. Ante todo, preferir¨ªa que se refiriera a la situaci¨®n en otros t¨¦rminos: yo simplemente he pretendido que se me mantuviera el mismo nivel de confianza que el partido me otorg¨® hace cuatro a?os. De otra parte, ha existido otro aspecto fundamental de mis planteamientos, que quiz¨¢ no ha tenido la misma resonancia, porque fue aceptado, en t¨¦rminos generales, desde el primer momento: se trata de la forma de establecer las relaciones entre las instituciones nacionales y regionales vascas. Por decirlo m¨¢s claramente, de la aplicaci¨®n pr¨¢ctica de la Ley de Territorios Hist¨®ricos (LTH), que regula las competencias y los recursos correspondientes al Gobierno vasco y a las diputaciones forales. ?ste era un problema, a mi entender, m¨¢s importante que mi estatus personal, exento o no de disciplina de partido. En todo este problema no ha habido m¨¢s que una discusi¨®n abierta en torno a concepciones diferentes y leg¨ªtimas que se ha solventado por procedimientos democr¨¢ticos. Y a la hora de verter mis elogios, no s¨¦ qu¨¦ realzar¨ªa m¨¢s: si el funcionamiento din¨¢mico de las bases y organizaciones municipales y regionales del partido o el respeto de su ejecutiva a las decisiones de las asambleas.
"El d¨ªa 1 ten¨ªa decidido no volver a ser candidato"
P. Informaciones, al parecer interesadas, aseguraban que usted hab¨ªa aducido razones familiares, fundamentalmente personales, para no presentarse a la reelecci¨®n. ?Qu¨¦ ha habido, en realidad, de todo esto?
R. No deseo, como he dicho desde el principio, hablar del pasado, pero creo que he dejado suficientemente claro que en m¨ª nunca han prevalecido ning¨²n tipo de razones personales, porque cuando se ostenta este tipo de responsabilidades -la presidencia del Gobierno vasco- uno siempre tiene que sacrificar las razones personales, por importantes que sean. Y en este caso se da la circunstancia, por a?adidura, de que las razones fundamentales eran pol¨ªticas.
P.?Han sido, verdaderamente, los afiliados al PNV los que han decidido con su voto la soluci¨®n a la crisis planteada en el partido?
R. S¨ª, en efecto. En pocas ocasiones puede quedar tan patente el proceso d.e elaboraci¨®n de la voluntad de un partido que en menos de una semana ha recorrido ese proceso exhaustivo de consulta a las bases, Si me permite que lo diga, con cierto orgullo, no conozco ning¨²n ejemplo de participaci¨®n tan directa de los afiliados de base de un partido, cuyo principal activo, lo digo con toda convicci¨®n, es la calidad y entrega de sus militantes.
P. De verdad, ?ha pensado us ted en estos d¨ªas en retirarse de la pol¨ªtica activa?
R. S¨ª. He pensado, por supues to, en no volver a ser candidato a lendakari, No es que lo hubiera pensado, sino que el domingo, d¨ªa 1, lo ten¨ªa decidido. Pero eso no significa que me hubiera retirado de la pol¨ªtica activa. Dije p¨²blicamente que estar¨ªa a disposici¨®n de lo que mi partido me hubiera pedido. Por ejemplo, he sentido por momentos la enorme ilusi¨®n de luchar por mis ideales en mi tierra navarra y me hubiera sentido honrad¨ªsimo volviendo al Parlamento Foral de Navarra. Esto ha llegado a constituir una aut¨¦ntica ilusi¨®n para m¨ª, porque ser nacionalista, vasco en Navarra significa vivir muy a fondo los ideales que uno profesa.
P. Mi pregunta iba dirigida a si hab¨ªa pensado en retirarse de la vida pol¨ªtica, aunque fuera temporalmente.
R. Una temporada, s¨ª. Por supuesto que esto me hubiera gustado y entraba dentro de mis planes: hacer una pausa en el camino para poder leer muchas cosas que tengo pendientes, escribir algunas otras y despu¨¦s, al cabo de alg¨²n tiempo, empezar de nuevo con lo que da lentido a mi presencia en la pol¨ªtica la defensa de la identidad nacional de todo el pueblo vasco.
"Los nacionalistas vascos nos sentimos pol¨ªticos 'amateurs'"
P. Personas como Mario Fern¨¢ndez, vicepresidente del Gobierno vasco, Pedro Luis Uriarte, consejero de Econom¨ªa y H¨¢cienda, o Pedro Miguel Etxenike, consejero de Educaci¨®n y Cultura de su Gobierno, ya han anunciado su intenci¨®n de abandonar, al menos por ahora, la vida pol¨ªtica. En el supuesto de que usted ganara las elecciones, ?va a tener que recomponer pr¨¢cticamente por completo su equipo de gobierno?
R. Entre nosotros, los nacionalistas vascos, siempre tendremos ese problema, porque no existe el apego cl¨¢sico a la poltrona; nos sentimos pol¨ªticos arnateurs y has ta resulta evidente que nos ilusiona m¨¢s la lucha por nuestros ideales en la calle que envueltos en funciones burocr¨¢ticas o palaciegas... usted me entiende. De todas formas, yo espero que alguno de mis compa?eros que han mostrado es as intenciones reconsidere su postura. Y en todo caso, no vamos a repartir la piel del oso antes de cazarlo, es decir, antes de ganar las elecciones. Primero vamos a ganar las elecciones -sobre lo cual, perm¨ªtame que le diga que no abrigo ninguna duda, con todo respeto a nuestros adversarios pol¨ªtcos- y, despu¨¦s, creo que no ser¨¢ tarea imposible encontrar hombres capaces entre los miles de se guidores , muchos de ellos de enorme cualificaci¨®n profesional y dilatada militancia pol¨ªtica.
P. Esta situaci¨®n que ustedes, el PNV, han vivido la semana pasada, ?puede resultarles como un revuls¨ªvo, un acicate, de cara a las futuras elecciones?
R. A pesar de estar en fase claramente preelectoral, cr¨¦ame que yo vivo obsesionado por nuestras preocupaciones de siempre: sacar adelante Euskadi de su crisis econ¨®mica, aliviar la situaci¨®n de paro que,afecta a tantas de nuestras gentes, lograr la paz... Aunque algunos no perciban, especialmente desde la distancia, las etapas que se han atravesado en estos temas, creo que vamos avanzando y esa esperanza ilusionada de conducir a nuestro pueblo hacia las metas anteriormente citadas es la que nos empuja a ganar las elecciones con la idea de completar en el pr¨®ximo mandato la tarea ¨ªniciada cuatro a?os atr¨¢s. Nuestras bases as¨ª lo entienden y nuestro triunfo, una vez m¨¢s, se lo deberemos a ellas.
P. ?Qu¨¦ papel puede jugar la denominada guerra sucia en esta etapa ya preelectoral?
R. Los asesinatos, secuestros, y el horror de los desaparecidos, como Lasa y Zabala, es un esc¨¢ndalo que envilece a un Estado democr¨¢tico. Aqu¨ª no tenemos todav¨ªa pruebas sobre los autores, pero s¨ª convicciones morales, y ser¨ªa bueno que los sospechosos enmienden de inmediato este enorme error de patrocinar, directa o indirectamente, cualquier guerra sucia. Porque cuando el autor o el inductor de un crimen ocupa un puesto de responsabilidad, el crimen es particularmente m¨¢s grave. Y huelga decir que contribuye a alimentar la espiral de violencia que s¨®lo favorece a los radicalismos de cualquier signo.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.
Archivado En
- Relaciones Gobierno central
- Declaraciones prensa
- Pol¨ªtica nacional
- Elecciones Vascas 1984
- Guerra sucia
- Carlos Garaikoetxea
- EAJ-PNV
- Elecciones auton¨®micas
- Pol¨ªtica antiterrorista
- Gobierno auton¨®mico
- Pa¨ªs Vasco
- Elecciones
- Partidos pol¨ªticos
- Comunidades aut¨®nomas
- Lucha antiterrorista
- ETA
- Pol¨ªtica auton¨®mica
- Administraci¨®n auton¨®mica
- Grupos terroristas
- Gente
- Terrorismo
- Pol¨ªtica municipal
- Administraci¨®n p¨²blica
- Espa?a
- Pol¨ªtica