Jos¨¦ Mar¨ªa Garc¨ªa y la TV privada
En una emisi¨®n del programa Buenas noches, el locutor de radio Jos¨¦ Mar¨ªa Garc¨ªa, en un s¨ªmil de carta a los Reyes Magos, pidi¨® a los Reyes de Espa?a (los de la Zarzuela, precis¨®) una televisi¨®n privada. En realidad dijo pedir una televisi¨®n para todos los espa?oles, pues, afirm¨®, el Gobierno ya tiene la suya privada, desde la cual -todo hay que decirlo- realizaba tal petici¨®n. Luego le secundar¨ªa el humor de Pedro Ruiz, aunque sin dirigirse directamente a Sus Majestades. As¨ª, pues, pareci¨® abrirse una nueva campa?a de la derecha parecida a las del aborto o la LODE, esta vez alentada, sin embargo, por una anterior intervenci¨®n televisiva de Felipe Gonz¨¢lez. Ello no deber¨ªa sorprendernos: es natural e incluso leg¨ªtimo apelar a la presi¨®n de la opini¨®n p¨²blica cuando se carece de mayor¨ªa parlamentaria. Lo preocupante fue la llamada de Jos¨¦ Mar¨ªa Garc¨ªa al Rey para que tomara una decisi¨®n pol¨ªtica por encima del Gobierno. En la mente de todos est¨¢n quienes quer¨ªan que el Rey asumiera poderes que la Constituci¨®n no le otorga. El amarillismo del se?or Garcia -quien, por cierto, amenaz¨® en una emisi¨®n anterior de ese mismo programa con dedicarse al periodismo pol¨ªtico- es escandaloso, pero yo no cre¨ªa que pudiera llegar a ponerse en linea con quienes cumplen hoy prisi¨®n, militar por supuesto.Hay otro aspecto lamentable de la cuesti¨®n, y es que el Gobierno parece empe?ado en dar la raz¨®n a quienes piden insistentemente una televisi¨®n privada. La actuaci¨®n del equipo que dirige el se?or Calvi?o, que parece dedicada a mantener el monopolio del medio,
Pasa a la p¨¢gina 10
Viene de la p¨¢gina 9
incluso con gestos de prepotencia para con los canales auton¨®micos, no hace m¨¢s que aumentar el n¨²mero de ciudadanos que dicen su s¨ª a la televisi¨®n privada cuando son encuestados. Es responsabilidad del Gobierno hacer que la televisi¨®n sea plural, que forme e informe, y que guste y entretenga. Abrir la otra posibilidad, como insinuaba el presidente Gonz¨¢lez, no es m¨¢s que caer en la tentaci¨®n de dejar en manos privadas la atenci¨®n a unos derechos fundamentales de la persona, como la salud o la informaci¨®n. Es posible que en la disyuntiva entre control p¨²blico o iniciativa privada, ¨¦sta le gane la partida al Estado por lo que a eficacia se refiere. Pero todos sabemos tambi¨¦n qui¨¦nes pagan luego el precio de la eficacia. Y ¨¦ste no deber¨ªa ser, en absoluto, el objetivo de ning¨²n gobierno, ya sea socialista, socialdem¨®crata o, tan siquiera, liberal./
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.