Un funcionario descubri¨® el 'arreglo'

El problema de las sobrevaloraciones en los traspasos a Catalu?a sali¨® a la luz merced a un informe que el entonces jefe de la Oficina Presupuestaria del Ministerio de Educaci¨®n, C¨¦sar Estrada, hizo llegar al PSOE, seg¨²n fuentes de la pol¨ªtica auton¨®mica. Ese funcionario, simpatizante socialista, fue recompensado meses m¨¢s tarde con la Direcci¨®n General de Planificaci¨®n Educativa de la Junta andaluza.La historia comenz¨® en febrero de 1982, cuando UCD recib¨ªa el apoyo de Minor¨ªa Catalana para sacar adelante algunos proyectos legislativos. Coincidiendo con ello, el entonces ministro de Hacienda, Jaime Garc¨ªa A?overos, llegaba a un pacto con los representantes catalanes sobre la dotaci¨®n financiera para la comunidad aut¨®noma. El consenso se traduc¨ªa en la Comisi¨®n Mixta con un acuerdo adoptado el 25 de febrero de 1982.

Unos d¨ªas antes, el 18 de febrero, el Consejo de Pol¨ªtica Fiscal y Financiera de las Comunidades Aut¨®nomas (formado por todos los consejeros de Hacienda y por tres ministros) hab¨ªa aprobado una metodolog¨ªa com¨²n para los traspasos financieros. El acuerdo con Catalu?a ignor¨® tal circunstancia y se bas¨® en un m¨¦todo particular.

Tiempo despu¨¦s, en marzo de ese a?o, el funcionario C¨¦sar Estrada observ¨® que los datos correspondientes a su ministerio no le cuadraban. En una comunicaci¨®n interna, enviaba al Ministerio de Hacienda un informe reservado denunciando la sobrevaloraci¨®n. De una transferencia total de 153.510 millones, 21.098 eran enviados de regalo.

Como explicaci¨®n, indic¨® que para los c¨¢lculos del porcentaje sobre los ingresos del Estado se ha aplicado como a?o base el de 1979, y no 1980.

En el porcentaje de participaci¨®n de una comunidad en los ingresos del Estado (que es a su vez la suma de los porcentajes de cada servicio transferido) se utiliza una f¨®rmula matem¨¢tica en la que el coste efectivo del servicio traspasado es dividido por los ingresos tributarios registrados en el a?o anterior a la transferencia, exceptuados los impuestos cedidos a las autonom¨ªas. Al ser calculado el porcentaje de cada traspaso tomando los ingresos del Estado en 1979, la cifra resultante es mayor. Ello se debe a que esos ingresos aumentan cada a?o (suben la presi¨®n fiscal y la recaudaci¨®n) y, por tanto, el divisor es una cifra m¨¢s elevada si se emplea el dato correspondiente a 1980; y menor si se utilizan los datos de 1979, como ocurri¨®. Al ser el divisor un n¨²mero m¨¢s peque?o (los ingresos de 1979 y no 1980), la cifra resultante, obviamente, es una transferencia mayor.

Otras oficinas presupuestarias expresaron verbalmente sus quejas, y la suma algunas de ellas situ¨® el c¨¢lculo inicial de la sobrevaloraci¨®n en unos 25.000 millones.

A partir de ah¨ª, el PSOE comenz¨® a denunciar "turbias maniobras", y expres¨® sus sospechas basadas en el hecho de que se hab¨ªa enviado dinero inflado coincidiendo con un apoyo parlamentario. Ante el posible esc¨¢ndalo, UCD paraliz¨® en las Cortes la ley del Porcentaje de Participaci¨®n de Catalu?a en los Ingresos del Estado. El proyecto presentado a las Cortes situaba el porcentaje en el 1,581%. Las enmiendas del PSOE, que restaban en el c¨¢lculo la sobrevaloraci¨®n, lo dejaban en el 1,109%.

El funcionario C¨¦sar Estrada ha provocado con su actuaci¨®n que todas las comunidades aut¨®nomas fijen sus porcentajes de participaci¨®n bajo el mismo criterio, sin los desequilibrios que pudieran haberse derivado de un reparto de la tarta en el que lo que uno toma de m¨¢s otro fuese a echarlo en falta.