La CEE est¨¢ dividida sobre la oferta a hacer a Espa?a para el cap¨ªtulo agr¨ªcola
El llamado Grupo Espa?a, que prepara las negociaciones para el ingreso en el seno del Consejo de Ministros de la Comunidad Econ¨®mica Europea, est¨¢ partido en dos respecto a la postura a adoptar para el cap¨ªtulo agr¨ªcola. Francia, Grecia, Italia e Irlanda quieren el sistema de etapas para la integraci¨®n de las frutas y hortalizas espa?olas. Los otros pa¨ªses, importadores de estos productos y, por tanto, interesados en que entren a precios competitivos, se resisten tanto a este sistema como al de la vigilancia comunitaria para las importaciones provenientes de Espa?a que propuso la Comisi¨®n Europea en julio de 1983.
Quedan s¨®lo dos semanas para la sesi¨®n de negociaci¨®n a nivel ministerial del 21 de febrero. Pero, para algunas fuentes comunitarias, "existe el miedo de que algunas delegaciones no comprenden que la declaraci¨®n agr¨ªcola. a. Espa?a es necesaria antes de la cumbre europea" del 10 de marzo. En medios de la Comisi¨®n Europea se piensa que, de no abrirse el 21 de febrero, o al menos antes de la cumbre de marzo la negociaci¨®n agr¨ªcola con Espa?a, la fecha del 30 de septiembre de 1984 para la con clus¨ª¨®n de las negociaciones de adhesi¨®n ?puede darse por perdi da."Ya no intentamos resolver el problema, sino presentarlo de una forma que lo puedan entender nuestros embajadores y ministros", se?al¨® un miembro del Grupo Espa?a, para el cual lo ¨²nicos que pueden acabar con la indecisi¨®n son los ministros de Asuntos Exteriores de los diez cuando preparen la sesi¨®n el 20 de febrero. Se est¨¢n elaborando posiciones en forma de alternati vas. Una de ellas consiste en poner la pelota en el campo de Es pa?a ofreci¨¦ndole el sistema de las etapas en tanto no est¨¦ montada en Espa?a una organizaci¨®n corn¨²n de mercado, es decir, mientras no existan las organizaciones de productores y la normalizaci¨®n de los productos necesarias para aplicar la pol¨ªtica agr¨ªcola com¨²n.
La carencia de este mecanismo en Espa?a fue la justificaci¨®n de la Comisi¨®n Europea para proponer las etapas que suponen la no integraci¨®n de este sector espa?ol en la CEE durante cuatro a seis a?os. Se podr¨ªa, seg¨²n fuentes comunitarias, introducir cierta progresividad, pero bajo control, tanto del comercio como de la producci¨®n, con intervenci¨®n gradual de los fondos comunitarios de garant¨ªa al sector agr¨ªcola.
Claro que las etapas son tambi¨¦n una cuesti¨®n pol¨ªtica para el Gobierno franc¨¦s, que detenta la presidencia del Consejo de Ministros de la CEE. En Bruselas se sabe que la declaraci¨®n agr¨ªcola a Espa?a "no es una decla raci¨®n para Espa?a sino para Francia", que as¨ª puede "fijar el precio a pagar por la adhesi¨®n" tema ligado a la necesidad de que los agricultores franceses acepten algunas de las desagra dables reformas de la totalidad de la PAC. El Gobierno Mitterrand necesita, en esta cuesti¨®n neutralizar tanto a la oposici¨®n como al partido comunista.
Otras delegaciones en la CEE no se siente convencidas por estos argumentos de pol¨ªtica interna francesa. Estas seis delegaciones -Rep¨²blica Federal de Alemania, Reino Unido, B¨¦lgica, Holanda, Dinamarca y Luxemburgo- prefieren, por su propio inter¨¦s, un r¨¦gimen m¨¢s. liberal que las etapas. No porque Espa?a lo diga. Pero en su razonamiento se apoyan en el memor¨¢ndum presentado por Espa?a -un error t¨¢ctico espa?ol, seg¨²n algunas fuentes comunitar¨ªas- para criticar las propuestas de la Comisi¨®n Europea. La versi¨®n mediterr¨¢nea insiste en que "¨¦ste es un primer tiempo; en un segundo tiempo se podr¨¢n discutir concretamente las medidas.
Aunque necesaria, la negociaci¨®n bilateral con Fancia no basta. Seg¨²n fuentes espa?olas, en la visita a Madrid del ministro franc¨¦s para Asuntos Europeos Francia y Espa?a repasaron diversas alternativas. El pr¨®ximo fin de semana se ver¨¢n los resultados en la reuni¨®n hispano-francesa de Rambouillet. Pase lo que pase, sin embargo, y aunque Francia es el pa¨ªs central en este tema, cualquier cuesti¨®n de la adhesi¨®n necesita el acuerdo de los diez. Ni uno menos.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.