El Castilla del 'buitre' contin¨²a volando alto

El filial madridista puso los puntos sobre las ¨ªes, dej¨® al Valencia en el sitio que le corresponde y puede ser el que corte definitivamente la cuerda de la que pende el preparador Paquito, aunque ayer, antes del encuentro, ya se comentaba que la suerte estaba echada.La carga de nervios con que la afici¨®n blanca lleg¨® a los grader¨ªos y que se manifest¨® durante los primeros minutos fue distendi¨¦ndose lentamente. Las siete tarjetas amarillas mostradas por el colegiado catal¨¢n son el exponente de la dureza con que se emplearon los jugadores, haciendo gala del juego subterr¨¢neo practicado, en el que lo primero era la caza, del hombre.

Ya en el minuto 17, El Buitre, que durante todo el encuentro se mantuvo al acecho, avis¨® de lo que luego vino. Con la eliminatoria igualada, Butrague?o cedi¨®, en el minuto 71, un bal¨®n de oro a Pardeza, quien no tuvo m¨¢s que templar los nervios, mirar el marco defendido por Sempere y cruzar el esf¨¦rico fuera del alcance de ¨¦ste.

Cuando se cumpl¨ªa media hora y siete minutos, Jos¨¦ Manuel, ante una cantada de Sempere, cabecea fuera y, faltando 60 segundos para finalizar la primera mitad, Kempes, solo ante Ochotorena, apura demasiado un tiro flojo que sale por lo pelos.

Mientras el club visitante hizo su partido pr¨¢ctico, el Valencia tuvo que plantearse jugar a por todas. Paquito, y su asesor, Buqu¨¦, situaron a Tendillo relativamente adelantado, de manera que pudiera crear juego. Pero la movilidad y las ideas de la l¨ªnea medular blanca lleg¨® en el segundo per¨ªodo con la entrada al terreno de juego de Subirats.

Y lleg¨® el gol en el momento en que el club de Mestalla se mostraba desconocido, practicando un f¨²tbol arrollador. Pero seis minutos m¨¢s tarde llegar¨ªa el jarro de agua fr¨ªa a ra¨ªz de una r¨¢pida y h¨¢bil jugada culminada por Butrague?o y Pardeza. Era el final para los ch¨¦s.