Tres individuos atracan dos 'pubs' barceloneses en s¨®lo media hora, matan a uno de los due?os y hieren a dos personas m¨¢s

Un muerto y dos personas gravemente heridas es el resultado de dos atracos consecutivos a otros tantos pubs barceloneses que realizaron en la madrugada de ayer tres hombres, armados con dos pistolas y un rev¨®lver. Los dos golpes fueron realizados en menos de 30 minutos. El fallecido, propietario de un local de la avenida de la Meridiana, recibi¨® un disparo que le atraves¨® el est¨®mago. Los heridos son el titular del otro establecimiento y un cliente del fallecido. Pese a que se despleg¨® un gran aparato policial, los delincuentes lograron huir.

El fallecido, Rufino Garc¨ªa Gonz¨¢lez, de 38 a?os, era el propietario del pub Papae, situado en el n¨²mero 264 de la avenida de la Meridiana de Barcelona. Uno de sus clientes, Antonio Cucarella, un decorador barcelon¨¦s de 38 a?os, fue herido en el tiroteo entablado en el local. Media hora antes de que se produjeran estos incidentes, los tres atracadores hab¨ªan herido, en el pub Chocolate, de la calle de Mallorca, 321, al due?o del local, Juan Miserol Minart, de 34 a?os.Juan Miserol, a las 1.10 horas de ayer, estaba limpiando la barra pub Chocolate y llenando las neveras con botellas. De repente, dos hombres irrumpieron en el local armados con pistolas y exigieron el dinero de la caja y el de los dos clientes que hab¨ªa en una mesa. Cuando estaban a punto de recoger el bot¨ªn, Juan Miserol intent¨® oponer resistencia. Una de las armas se dispar¨® y la bala atraves¨® el hemit¨®rax derecho del propietario. Ayer noche su estado segu¨ªa siendo grave.

Antes de que una ambulancia llegara al pub Chocolate para trasladar al herido al hospital de Sant Pau los atracadores ya estaban ante otro pub, el Papae, de la Meridiana.

La operaci¨®n fue similar, Con la diferencia de: que en esta ocasi¨®n los tres atracadores, como medida intimidatoria, entraron en el bar disparando al aire.

Seg¨²n las declaraciones de Antonio Cucarella, herido en el atraco, los asaltantes pidieron a Rufino Garc¨ªa que les entregara todo el dinero que ten¨ªa. A empujones, el propietario fue introducido en la trastienda. "Fue entonces cuando intentamos reducir al tercero, que se hab¨ªa quedado entre nosotros. Lo logramos, pero alguien, para atemorizar a los que a¨²n estaban en la parte trasera del bar, grit¨®: '?La polic¨ªa!'."

Antonio Cucarella cont¨® que a partir de ese momento s¨®lo oy¨® "disparos y m¨¢s disparos. Rufino fue el primero en caer, porque era el escudo de los otros dos".