Andropov padece una enfermedad que mina su apariencia f¨ªsica, seg¨²n 'The Washington Post'

El m¨¢ximo dirigente sovi¨¦tico, Yuri Andropov, padece una enfermedad que degrada su apariencia f¨ªsica y su capacidad de palabra, seg¨²n rumores que circulan en Mosc¨², de los que ayer se hac¨ªa eco The Washington Post. Andropov, de 69 a?os de edad, lleva 173 d¨ªas sin aparecer en p¨²blico, y precisamente ayer se supo que su hijo Igor Andropov, miembro de la delegaci¨®n sovi¨¦tica en la Conferencia de Estocolmo, hab¨ªa viajado de improviso a Mosc¨² el lunes pasado "por razones familiares", informa France Press desde la capital sueca.No obstante, los funcionarios del Kremlin siguen afirmando que el dirigente sovi¨¦tico se recupera sin problemas de las complicaciones renales sufridas en el oto?o.

The Washington Post, seg¨²n informa la agencia Efe, se hace eco de comentarios recogidos en c¨ªrculos oficiales de Mosc¨², seg¨²n los cuales Andropov sufre actualmente una atrofia muscular progresiva que le impide vocalizar correctamente. El presidente del Presidium del Soviet Supremo tiene un historial m¨¦dico de diabetes y ha experimentado frecuentes problemas cardiacos. Andropov deber¨ªa pronunciar unas palabras ante los votantes de su distrito electoral para los comicios al Soviet Supremo que tendr¨¢n lugar el 4 de marzo, y el Post dice que "su ausencia (en este acto) pondr¨ªa la cuesti¨®n de la sucesi¨®n en el primer lugar de la lista".

"Las conversaciones con responsables sovi¨¦ticos dan la impresi¨®n de que la salud de Andropov y sus conocidas debilidades f¨ªsicas han producido un ambiente de crisis en el Kremlin", a?ade. Uno de los principales problemas en la coyuntura pol¨ªtica de la Uni¨®n Sovi¨¦tica en estos momentos es que no existe un posible claro sucesor de Andropov. "Cuanto m¨¢s invisible permanece Andropov, m¨¢s especulaci¨®n hay respecto al problema del liderazgo, a pesar de la propaganda para mantener una ilusi¨®n de normalidad y estabilidad", agrega el diario.