No usar la Constituci¨®n en vano

Las acusaciones de inconstitucionalidad planearon, una vez m¨¢s, sobre un proyecto de ley presentado por el Gobierno a las Cortes: ayer le toc¨® el turno al de regulaci¨®n de los cultivos marinos, que, seg¨²n estimaron los grupos Popular, Centrista, Minor¨ªa Catalana y Vasco, atenta, en beneficio de los poderes del Gobierno central, contra las competencias de las comunidades aut¨®nomas garantizadas por la ley fundamental. El diputado canario Paulino Montes de Oca, perteneciente al Grupo Popular, lleg¨® a citar en apoyo de sus tesis incluso algunas normativas de los estatutos de autonom¨ªa de Castilla y Le¨®n, Castilla-La Mancha, Madrid, Arag¨®n, Navarra y Extremadura, comunidades, por otra parte, escasamente interesadas en los cultivos marinos regulados por esta ley, destinada a complementar o sustituir la actividad pesquera.El diputado centrista, y canario como el anterior, Luis Mardones pidi¨® que "nuestra Constituci¨®n no se ande deteriorando por apoyarse en ella para dar cabida a proyectos de ley como ¨¦ste", despu¨¦s de que el socialista gallego Jos¨¦ V¨¢zquez Fouz negase la inconstitucionalidad del texto arguyendo que "los preceptos constitucionales admiten varias interpretaciones".

Ese deterioro que supone e uso y abuso de esgrimir preceptos de la Constituci¨®n para defensa o ataque de un proyecto de ley, denunciado por Mardones, qued¨® a¨²n m¨¢s de manifiesto cuando el mismo diputado rebaj¨® el nivel parlamentario de la discusi¨®n de un proyecto gubernamental sometido a la mayor de las acusaciones: la de presunta inconstitucionalidad.

El diputado centrista habl¨® del lenguaje "propio de un convento de ursulinas" utilizado en el texto gubernamental a la hora de referirse a la c¨®pula y reproducci¨®n de los crust¨¢ceos; y se refiri¨® a "langostas legales e ilegales".