Libertad de un fugitivo

El cabo atrapado, como una buena parte de la obra de Jean Renoir, es una defensa de la libertad. No se trata de una apolog¨ªa hecha desde grandes principios morales o profundas formulaciones te¨®ricas. Renoir no las desprecia, pero prefiere considerar el hombre desde una ¨®ptica vitalista, inmediata, sensual.

Su protagonista, el cabo franc¨¦s capturado por los alemanes al principio de la Segunda Guerra Mundial, que intenta fugarse en seis ocasiones del cautiverio, no sabe qu¨¦ es lo que le impulsa a escapar. Cuando despu¨¦s de la tercera tentativa frustrada es castigado, parece ceder en su necesidad de libertad.

Pero un dolor de muelas, seguido de la declaraci¨®n de amor de la hija del dentista -que le desea, precisamente, por su empe?o en huir- har¨¢ que recupere sus ganas de escapar.

Para Renoir el universo concentracionario de los nazis funciona como una met¨¢fora del fin del mundo. Hitler, Mussolini y sus ep¨ªgonos lo ¨²nico que hacen, al crear una organizaci¨®n social monstruosa con el prop¨®sito de asegurar la supervivencia del capitalismo, es desacreditar los antiguos valores occidentales. S¨®lo se existe realmente luchando por la libertad, fug¨¢ndose para manifestarse sin coacci¨®n alguna, siendo por fin uno mismo.

El cabo atrapado se emite hoy a las 22.00 por la segunda cadena.