El sorprendente caso del doctor Rivera
El s¨¢bado 18 de febrero se public¨® en esta misma secci¨®n una carta de 15 m¨¦dicos de Ja¨¦n respecto al protagonismo pol¨ªtico que desempe?a el doctor Rivera usando como plataforma la representaci¨®n m¨¦dica colegial, que ven¨ªa a cuento del libro de Bernard Debr¨¦ La sanidad francesa, enferma. Reflexiones a la experiencia francesa tras el cambio socialista, que nos fue enviado a todos los m¨¦dicos espa?oles desde la organizaci¨®n m¨¦dica colegial. La recepci¨®n de dicho libro me produjo gran indignaci¨®n y, por ello, experiment¨¦ una especie de sensaci¨®n de honor salvado al leer la carta de mis compa?eros, la cual suscribo ¨ªntegramente.Sin que constituyera excesiva sorpresa, de nuevo salta el doctor Riveraa la Prensa, esta vez como protagonista de un autogolpe con final feliz dle los que de un tiempo a esta parte nos tienen acostumbrados nuestros pol¨ªticos. Primero fue Felipe Gonz¨¢lez; recientemente, Carlos Garaikoetxea, y ahora, Ramiro Rivera. Los tres se marcharon como la forma m¨¢s segura de no irse, para volver ante el clamor de sus bases. ?Ir¨¢ realmente en serio lo de Escuredo? Parece que la maniobra funciona.
Si bien en los dos primeros casos no rne parece especialmente reprochable, s¨ª lo es -y mucho- en el caso del doctor Rivera, y como m¨¦dico me siento en la obligaci¨®n moral de manifestarlo.
Est¨¢ claro que para Ramiro Rivera hasido una maniobra de relanzamiento, apareciendo as¨ª ante los espaholes y ante la Administraci¨®n como l¨ªder indiscutible de los m¨¦dicos.
Me res¨¢sto a sentirme dirigido
Pasa a la p¨¢gina 10
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.