Aument¨® la incidencia de la huelga de profesores de ense?anza media y b¨¢sica

M¨¢s de 90.000 profesores, unos 20.000 m¨¢s que el mi¨¦rcoles, secundaron ayer la huelga de dos d¨ªas convocada por siete organizaciones sindicales y profesionales del sector estatal de ense?anzas b¨¢sica y media, seg¨²n las estimaciones de los convocantes. Los profesores tienen intenci¨®n de volver a la huelga durante el mes de marzo, si no obtienen respuestas convincentes de la Administraci¨®n educativa para las reivindicaciones que van a plantear a ¨¦sta en las pr¨®ximas negociaciones.

Por su parte, el ministerio admiti¨® que el paro aument¨® el segundo d¨ªa "liger¨ªsimamente", en un 2% m¨¢s de huelguistas, y fij¨® el n¨²mero de profesores en paro en un 20% del total, es decir, aproximadamente unos 50.000, justamente la mitad de la cifra estimada por las organizaciones que promovieron la huelga. En funci¨®n de las estimaciones de ambas fuentes, y a una media de 30 alumnos por profesor, la cifra de escolares que pueden haberse visto afectados por la huelga oscilar¨ªa entre los tres millones y 1.500.000.El paro, que no fue secundado por la Asociaci¨®n de Maestros de Taller de Formaci¨®n Profesional y al que se opuso abiertamente la Federaci¨®n de Ense?anza de UGT, fue convocado por las asociaciones nacionales de profesores de EGB y de Bachillerato, as¨ª como por la Federaci¨®n Sindical de Profesores Estatales de EGB (FESPE), la Federaci¨®n de Ense?anza de CC OO y la Uni¨®n Confederal de Sindicatos de Trabajadores de la Ense?anza (UCSTE).

Los profesores quieren que en las pr¨®ximas conversaciones el Ministerio acepte negociar sin exclusiones todos los puntos de la plataforma reivindicativa de esta huelga, algunos de los cuales el ministerio los considera ya resueltos, como es el relativo al proceso de homologaci¨®n de las retribuciones complementarias del profesorado con las del resto de los funcionarios. Un acuerdo sobre este punto fue firmado en su d¨ªa por FETE-UGT, precisamente el ¨²nico sindicato del sector que no secunda la huelga. Otras cuestiones, como la relativa a las elecciones sindicales o la futura reforma de la Seguridad Social, el Ministerio de Educaci¨®n y Ciencia dice que no son estrictamente de su competencia.

Cuando los profesores aluden a la cuesti¨®n de la seguridad social se refieren fundamentalmente a las reformas que a modo de contrapartidas se anunciaban en la disposici¨®n adicional quinta de la ley de Presupuestos Generales del Estado de 1981. Dicha disposici¨®n supuso el inicio de un proceso de reducci¨®n progresiva de la cuant¨ªa de las prestaciones que los maestros ven¨ªan percibiendo al jubilarse. Estas percepciones se derivaban de las cotizaciones a la extinguida Mutualidad Nacional de Ense?anza Primaria antes de que ¨¦sta fuese absorbida por la Mutualidad de Funcionarios Civiles del Estado (MUFACE).

Como consecuencia de esta disposici¨®n, que se produjo precisamente en v¨ªsperas de la decisi¨®n de reducir la edad de jubilaci¨®n obligatoria de los maestros de los 70 a los 65 a?os, las percepciones por este concepto se retrotrajeron a la cuant¨ªa que ten¨ªan en 1973.

La medida provoc¨® un clamor en contra de todos los maestros nacionales, particularmente entre los m¨¢s viejos, es decir quienes estuvieron cotizando a la antigua mutualidad durante toda su vida profesional, y se lleg¨® a interponer un recurso de inconstitucionalidad, desestimado posteriormente por el Tribunal Constitucional. Los maestros acataron inevitablemente la sentencia del Alto Tribunal, pero recuerdan ahora a la Administraci¨®n socialista que fue precisamente el PSOE, entonces en la oposici¨®n, el que present¨® dicho recurso y probablemente el grupo parlamentario que m¨¢s se distingui¨® por sus cr¨ªticas a la reiterada disposici¨®n adicional.