El presidente mauritano acumula los puestos clave del Gobierno

Por tercera vez en los ¨²ltimos seis meses, el presidente mauritano, Juna Uld Jaidala, ha procedido a un reajuste gubernamental el jueves pasado. Jaidala acumula ahora, adem¨¢s de su funci¨®n de presidente, la de jefe del Gobierno y ministro de Defensa, cargos que desempe?aba Mauiya Uld Sidi Ahmed Taya, que fue nombrado, no obstante, jefe del Estado Mayor del Ej¨¦rcito. Con esta concentraci¨®n de puestos clave en manos de Jaidala, el dirigente mauritano intenta afrontar una etapa de dif¨ªciles relaciones con Marruecos.Aunque nadie parece estar en condiciones de afirmar que este cambio tenga alguna relaci¨®n con el reciente reconocimiento de la Rep¨²blica ?rabe Saharaui Democr¨¢tica (RASD), lo cierto es que parece sugerir un intento de Jaidala de controlar los puestos clave en una pr¨®xima etapa diricil en la que no est¨¢ excluida una confrontaci¨®n con Marruecos.

Cr¨ªticas a T¨²nez

Los otros cambios se refieren al ministro del Interior, Ahmedu Uld Abdala, sustituido sin ninguna explicaci¨®n oficial por el teniente coronel Yall Abdulaye; al nombramiento de un ministro de la Pesca, al haberse desprendido Jaidala de esta cartera, que desempe?aba ¨¦l personalmente, y al nombramiento de un nuevo ministro de Minas y Energ¨ªa, otro de Desarrollo Rural y un ¨²ltimo ministro de Cultura, Juventud y Deportes.La Prensa marroqu¨ª, que critic¨® severamente en los ¨²ltimos d¨ªas el reconocimiento de la RASD por Mauritania, se pronunci¨® ayer contra el texto del comunicado conjunto publicado en Argel entre el partido ¨²nico argelino, Frente de Liberaci¨®n Nacional (FLN), y el partido gobernante tunecino, el nacionalista Neodestur.

El comunicado en cuesti¨®n, que reclama la celebraci¨®n de negociaciones directas entre Marruecos y el Frente Polisario, reconoce expl¨ªcitamente "el derecho del pueblo saharaui a la autodeterminaci¨®n y la independencia", lo cual ha sido considerado oficialmente en Rabat como una "traici¨®n a la unidad del Magreb".

El cambio del partido gobernante tunecino, hasta ahora aliado de Marruecos en lo que al conflicto del S¨¢hara se refiere, ha sido considerado como un nuevo golpe en Rabat, en donde el rey Hassan II acaba de reiterar en un mensaje al presidente de la Organizaci¨®n para la Unidad Africana (OUA) su disposici¨®n a decretar un alto el fuego y llevar a cabo el refer¨¦ndum de autodeterminaci¨®n, al miesmo tiempo que expresaba nuevamente su negativa rotunda a emprender conversaciones directas con el Frente Polisario.