El Gobierno introduce en el PEN una el cl¨¢usula que permitir¨¢ el funcionamiento de la central Valdecaballeros I

El Consejo de Ministros aprob¨® ayer el env¨ªo al Parlamento del primer Plan Energ¨¦tico Nacional (PEN) que elabora el Gobierno socialista y que, seg¨²n declar¨® el titular de Industria y Energ¨ªa, Carlos Solchaga, contiene la paralizaci¨®n de las obras de la central nuclear de Valdecaballeros (propiedad de un consorcio de las empresas Hidroel¨¦ctrica Espa?ola y Sevillana de Electricidad), cuyo grupo primero est¨¢ en un estado bastante avanzado de construcci¨®n. No obstante, el propio Solchaga anunci¨® que el PEN aprobado contiene una cl¨¢usula revisoria, en funci¨®n del crecimiento de la demanda el¨¦ctrica, que deja abierta la puerta al posterior enchufe a la red de cualquier central de las cinco afectadas por la moratoria nuclear socialista.

Los m¨¢s de 200 folios que forman el documento t¨¦cnico enviado a las Cortes ratifica, por tanto, la paralizaci¨®n en las obras de los dos grupos de Lem¨®niz, que fueron interrupidas durante el mandato del Gobierno anterior, y la no construcci¨®n definitiva de los segundos grupos de Valdecaballeros y Trillo, donde apenas se han invertido sumas importantes de dinero. En total, pues, se paralizar¨¢n las obras de cinco de las doce centrales nucleares aprobadas por anteriores legislaturas, en los que las inversiones han alcanzado, seg¨²n el propio Solchaga, la cifra de 496.000 millones de pesetas, incluyendo intereses de financiaci¨®n.Lo que representa la primera concreci¨®n oficial de la moratoria nuclear anunciada hace meses por el propio Solchaga, el anuncio del ministro de Industria significa que s¨®lo las centrales nucleares Trillo I y Vandell¨®s II, donde se han invertido en total una cantidad superior a los 200.000 millones de pesetas, tienen garantizada por ahora su enchufe a la red, aparte de las ya finalizadas como Cofrentes y Asc¨® II.

Soluci¨®n imaginativa

Pese al impacto que esta decisi¨®n puede tener en las empresas propietarias de las centrales afectadas, el ministro de Industria inform¨® de lo que parece ser una soluci¨®n imaginativa ante los problemas y quejas que han planteado las compa?¨ªas del sector el¨¦ctrico: el propio PEN, dijo Solchaga, contiene una disposici¨®n transitoria que, de crecer la demanda el¨¦ctrica por encima de las previsiones del propio documento (entre el 3,3 y el 4,7 acumulativo anual hasta 1992), se podr¨ªa modificar este criterio de paralizaci¨®n de obras en centrales nuclerares.

La disposici¨®n transitoria, presentada por el propio Solchaga como "un criterio autom¨¢tico de modificaci¨®n" de estas previsiones, es un logro mayor en las exigencias de sectores industriales espa?oles, tanto el¨¦ctricos como fabricantes de bienes de equipo, para que la inicial moratoria nuclear anunciada por el Gobierno fuera modificada. En otras palabras, la cla¨²sula revisoria introducida en el PEN representa una derrota de las posiciones m¨¢s radicales del gabinete que abogaban por una mayor extensi¨®n del denominado par¨®n nuclear.

Solchaga anunci¨®, adem¨¢s, que en los pr¨®ximos d¨ªas se cursar¨¢n instrucciones a los propietarios de los dos grupos de Vadecaballeros para que interrumpan las obras. No obstante, el ministro admiti¨® que podr¨ªa existir un retraso, ya que jur¨ªdicamente es posible que se tenga que esperar a que el Congreso de los Diputados apruebe el PEN.

El titular de Industria hizo un breve resumen de las previsiones del PEN al t¨¦rmino del Consejo de Ministros, en un aparente intento de rechazar las cr¨ªticas que, calific¨¢ndolo de simplista y voluntarista, se han lanzado contra el mismo desde el sector industrial. Seg¨²n su opini¨®n, el documento contiene unos objetivos muy ambiciosos en cuanto a la necesidad de dotar de eficiencia al sector energ¨¦tico, as¨ª como de iniciar programas mucho m¨¢s profundos de ahorro de energ¨ªa que los iniciados en el pasado. El PEN contiene, a este respecto, el objetivo de ahorrar hasta 10,3 millones anuales de TEC (toneladas equivalentes de carb¨®n) de energ¨ªa en el horizonte de 1992.

Excesivo consumo energ¨¦tico

El ministro insisti¨® en que en Espa?a se consume mucha energ¨ªa por unidad de PIB producida y que la capacidad de ahorro energ¨¦tico de la industria espa?ola est¨¢ a¨²n sin explorar. Aparte de estos dos principios, eficiencia y ahorro, el PEN prev¨¦ una importante disminuci¨®n (hasta 12 puntos porcentauales) de la importancia del petr¨®leo en la energ¨ªa primaria, as¨ª como un mayor ¨¦nfasis en la electricidad de origen hidr¨¢ulico y nuclear.

El futuro del gas natural, por el contrario, se contempla con un mayor escepticismo, al estimarse que su participaci¨®n en el total de la energ¨ªa primaria s¨®lo puede llegar a ser del 4,6% a final del decenio, frente al 3,2% actual.

Por otro lado, el Consejo de Ministros tambi¨¦n aprob¨® el Plan de Actuaci¨®n, Inversi¨®n y Financiaci¨®n de diversas empresas p¨²blicas por un total de 730.992 millones de pesetas. Estas empresas incluyen la agencia Efe, Banco de Cr¨¦dito Agr¨ªcola, Cr¨¦dito Industrial, Cr¨¦dito Local, Exterior de Espa?a, Hipotecario, Renfe, Tabacalera, Transmediterr¨¢nea, hasta un total de 36 sociedades.