M¨ªtica visi¨®n de Buenos Aires

La noticia de la muerte de Manuel Mujica L¨¢inez caus¨® un hondo pesar entre los escritores de su generaci¨®n. El argentino Ernesto S¨¢bato record¨® que "su porte, su iron¨ªa, su gracia mundana, lo llevaron a ser una aut¨¦ntica instituci¨®n porte?a que quedar¨¢ eternamente en la memoria de todos. Desaparece un escritor ligado entra?ablemente a la vida de Buenos Aires, ciudad a la que am¨® como muy pocos".La escritora Beatriz Guido, quien ocupar¨¢ pr¨®ximamente su cargo de agregada cultural en la embajada argentina en Espa?a, asegur¨® que "la desaparici¨®n f¨ªsica del escritor viste de luto a todos los hombres de letras de Argentina porque fue uno de sus m¨¢ximos exponentes. Luch¨® con su obra por una literatura comprometida y sufri¨® la prohibici¨®n de varios de sus libros. Por eso no dudo en calificarlo como un valiente".

"Lo ¨²nico que puede decirse es que su vida estuvo por dem¨¢s justificada, porque solamente con su obra. Misteriosa Buenos Aires ya estar¨ªa justificada la vida de cualquier hombre. Decir algo m¨¢s ser¨ªa agregar m¨¢s tristeza", dijo el autor teatral Carlos Gorostizal, secretario de Cultura argentino.

El escritor peruano Mario Vargas Llosa calific¨® la figura de Mujica L¨¢inez como "una de las m¨¢s importantes de su generaci¨®n". "Era un escritor tradicional", continu¨® Vargas Llosa, "por su temperamento, estilo y por sus temas. Marc¨® una etapa muy brillante en Argentina, pero estuvo siempre algo alejado de los nuevos narradores hispanoamericanos, tanto est¨¦tica como pol¨ªticamente".

"No tuvo la fuerza que un Borges o un Cort¨¢zar. han tenido para los de nuestra generaci¨®n", dijo el escritor argentino Daniel Moyano, exiliado en Espa?a, "pero era un escritor al que hay que tener en cuenta dentro del movimiento general de nuestra literatura, Gracias a Mujica L¨¢inez acced¨ª a Buenos Aires, ya que trat¨® a esta ciudad como mito y para un hombre del interior como yo, aquella visi¨®n era muy importante. Pese a sus declaraciones o imposturas, Mujica L¨¢inez no se sent¨ªa c¨®modo en Argentina, como tantos otros escritores. Siempre so?¨® con las lejan¨ªas. Es verdad que no se comprometi¨® pol¨ªticamente, pero fue debido a que ¨¦l estaba en otra historia diferente. Se refugi¨® en su a?oranza de ¨¦pocas pret¨¦ritas".

Para Eduardo Galeano, escritor uruguayo tambi¨¦n exiliado en Espa?a, Mujica L¨¢inez fue un autor al que ley¨® en su juventud. "Prefiero no hablar de ¨¦l ahora", dijo Galeano, "porque no tengo fresca su obra. Hace muchos a?os que lo le¨ª y la verdad es que nunca me he sentido muy pr¨®ximo a ¨¦l".

Pedro La¨ªn Entralgo, director de la Real Academia Espa?ola, conoci¨® al Mujica L¨¢inez en Buenos Aires, en 1948. "He perdido a un amigo", dijo al enterarse de la noticia.De su obra admiro la vivacidad de su estilo, su capacidad de actualizaci¨®n de los temas del pasado y su profundizaci¨®n en el idioma. Como persona era ingenioso, simp¨¢tico y cordial".