Raimon Obiols admite la erosion y la fuga el voto nacionalista del PSC
Antes de que el conseller de Gobernaci¨®n Maci¨¤ Alavedra terminase de exponer por televisi¨®n los resultados de la muestra electoral oficial, la plana mayor del PSC hab¨ªa comparecido ya ante los medios de comunicaci¨®n y los militantes del partido para reconocer la derrota en base a los resultados de su propio sondeo, que daba entre 67 y 70 diputados a CiU. De las valoraciones que extrajo de los resultados, el candidato Raimon Obiols destac¨® el reconocimiento de la erosi¨®n del voto que desde sectores nacionalistas o catalanistas hab¨ªa sido otorgado hasta ahora al PSC. Estas palabras provocaron una cierta expectaci¨®n en el cuartel electoral de los socialistas.
La declaraci¨®n oficial de Raimon Obiols, quien se encontraba acompa?ado por el ministro de Defensa, Narc¨ªs Serra, se produjo a las diez en punto de la noche, ante periodistas y militantes del partido. "He de comentar sin satisfacci¨®n pero con tranquilidad y serenidad los resultados del sondeo que acaba de anunciar Isidre Molas", comenz¨® diciendo Raimon Obiols. Las palabras que pronunci¨® a continuaci¨®n no fueron en absoluto fruto de la improvisaci¨®n. Las tra¨ªa, incluso, redactadas textualmente en un papel y evidenciaban ser el fruto de la reflexi¨®n que entre las nueve y las diez de la noche hab¨ªa mantenido habitaciones reservadas del hotel.Obiols reconoci¨® en primer lugar la victoria de CiU y remarc¨® el ascenso de votos del PSC respecto a las auton¨®tr¨²cas anteriores. Dicho ¨¦sto valor¨® los resultados con tres reflexiones: "Reconocemos", dijo en primer lugar, "una cierta derrota en el planteamiento de lucha contra la abstenci¨®n, pues no se ha modificado sustancialemtne en relaci¨®n a 1980". "Pero consideramos", a?adi¨®, "que es tambi¨¦n un fracaso para la pol¨ªtica catalana, pues revela que hay un importante porcentaje de ciudadanos que votan en las municipales, votan tarnbi¨¦n en las generales, y en cambio no se sienten motivados para votar en las auton¨®micas. Y ¨¦sto nos preocupa, mucho m¨¢s que como socialistas, como catalanes".
"Comprobamos", dijo en segundo lugar, "una bipolarizaid¨®n del voto y tambi¨¦n una concentraci¨®n del voto del centro y la derecha en CiU, considerada esta vez el voto ¨²til de derechas, lo cual provoca una situaci¨®n pol¨ªtica y parlamentaria nueva que es preciso analizar con mayor detenimiento. Comprobamos, al mismo tiempo, un avance del PSC en el campo de la izquierda, lo que nos da una enorme responsabilidad como primer partido de la oposici¨®n".
El tercer punto enumerado por Obiols fue valorado por todos los asistentes como de una gran importancia a la hora de interpretar la actitud del partido en el futuro. Dijo Obiols: "Comprobarnos, por ¨²ltimo, un cierto proceso de erosi¨®n o desafecci¨®n del voto de posiciones" nacionalistas y catalanistas que en otras elecciones iban a parar a los socialistas". Esta frase dio pie, en los posteriores corrillos entre los militantes, a serias autocr¨ªticas sobre la imagen que el partido ha dado en los ¨²ltimos cuatro a?os y tambi¨¦n sobre las negativas repercusiones que ha tenido en ciertos sectores catalanes declaraciones poco afortunadas de dirigentes del PSOE en relaci¨®n a Catalu?a.
Generalitat y ayuntamientos
Raimon Obiols abandon¨® pasadas las once de la noche el hotel y se desplaz¨® al Palau Robert para felicitar a Jordi Pujol. Obiols fue abucheado por simpatizantes de CiU a su llegada al centro oficial de recogida de datos. El secretario general del PSC se mostr¨® sorprendido por la ausencia de Pujol y manifest¨®: "Nosotros hemos demostrado que sabemos perder, pero tambi¨¦n ha de saberse ganar".
El alcalde Pasqual Maragall hizo gala de un fino sentido del humor durante el tiempo que permaneci¨® en el hotel. "Los electores catalanes", dijo al serle pedida una valoraci¨®n sobre los resultados electorales, "han demostrado comportarse como los inversores en bolsa, cuya m¨¢xima preocupaci¨®n es diversificar el riesgo". Pasqual Maragall neg¨® que los resultados del PSC puedan ser interpretados como un desgaste del gobierno del PSOE, trasvas¨¢ndose votos, que en las municipales fueron al PSC y en las legislativas a Felipe Gonz¨¢lez, a Pujol. Parece claro, pues, que al elector catal¨¢n no le gusta guardar todos los huevos en la misma cesta". Sobre el futuro de las relaciones entre los ayuntamientos, y en particular el de Barcelona, con la Generalitat, Maragall hizo una afirmaci¨®n que nadie esperaba y pocos creen: "Yo creo que mejorar¨¢n, y mucho".
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