Ninguno de los candidatos a la Real Academia logra los votos para ser elegido

Ninguno de los tres candidatos presentados a un sill¨®n de nueva creaci¨®n en la Real Academia Espa?ola de la Lengua consigui¨¢ el n¨²mero suriciente de votos como para ser elegido. En las votaciones celebradas ayer, hasta un total de tres, los votos se repartieron casi por igual altern¨¢ndose los tres autores presentados en mayor¨ªas insuricientes. Compet¨ªan para este sill¨®n Jos¨¦ Mar¨ªa de Areilza, diplom¨¢tico y escritor, Jos¨¦ Luis Castillo-Puche, novelista, y Jes¨²s Fern¨¢ndez Santos, tambi¨¦n novelista. Estos dos ¨²ltimos ya hab¨ªan competido -junto al novelista Juan Benet- en unas elecciones recientes en las que tambi¨¦n hubo empate. Jos¨¦ Mar¨ªa de Areilza, ex presidente de la Asamblea del Consejo de Europa, acud¨ªa por primera vez a la competici¨®n.

La nulidad de la votaci¨®n de ayer en la Academia no se produce por primera vez, y es consecuencia de la mec¨¢nica de la entidad acad¨¦mica. En la primera votaci¨®n es necesario obtener dos tercios de los acad¨¦micos reales, independientemente de su presencia o no en el momento de la votaci¨®n, y se acepta la votaci¨®n por correo. En la segunda votaci¨®n, la mayor¨ªa necesaria es la de dos tercios de los acad¨¦micos presentes, que ayer eran 27 de los 40 miembros de n¨²mero que componen la Academia -a¨²n no han tomado posesi¨®n de su cargo Juan Rof Carballo, Francisco Ayala y Valent¨ªn Garc¨ªa Yebra- En la tercera y ¨²ltima votaci¨®n resulta imprescindible obtener el 50% m¨¢s uno de los acad¨¦micos presentes para resultar elegido acad¨¦mico.Ni Jes¨²s Fern¨¢ndez Santos, ni Jos¨¦ Mar¨ªa de Areilza, ni Jos¨¦ Luis Castillo-Puche consiguieron los m¨ªnimos necesarios en ninguna de las tres ocasiones. En la tercera de las votaciones se emitieron 27 votos, de los cuales uno qued¨® en blanco, posiblemente por error, seg¨²n algunos acad¨¦micos. Seis papeletas hab¨ªan sido remitidas por correo.

Resultado habitual

Para Miguel Delibes el resultado no debe desanimar a nadie y es muy habitual cuando se presentan m¨¢s de dos candidatos. Este resultado no debe interpretarse como el veto a ninguno de los candidatos, sino como la l¨®gica discrepancia entre las opiniones y preferencias de los acad¨¦micos. En el mismo sentido se manifest¨® Antonio Buero Vallejo, quien record¨® la existencia de una norma interna que recomienda, aunque no impone, que los candidatos no superen el n¨²mero de dos. Sin embargo, consider¨® que los acad¨¦micos estaban en su perfecto derecho de presentar cuantos candidatos crean convenientes y a?adi¨® que esperaba que la no elecci¨®n de acad¨¦mico no desanimara en la escritura a ninguno de los no elegidos. La notificaci¨®n oficial de la votaci¨®n nula, sin especificaci¨®n de resultados, "para no herir susceptibilidades de nadie", la hizo p¨²blica Alonso Zamora Vicente, secretario de la Academia. La valoraci¨®n de Zamora respecto a la votaci¨®n coincidi¨® con la de los otros acad¨¦micos.La presentaci¨®n de tres personas a un sill¨®n, desaconsejada por una recomendaci¨®n de r¨¦gimen interno en la Academia, refleja, seg¨²n Alonso Zamora, "el estado excelente en la vida intelectual del pa¨ªs" y matiz¨® que los candidatos "pueden ser presentador cuantas veces se quiera".

Los aspirantes a acad¨¦micos hab¨ªan tenido diversos padrinos. Jos¨¦ Mar¨ªa de Areilza, que compet¨ªa por primera vez, hab¨ªa sido presentado por Fernando L¨¢zaro Carreter, Antonio Tovar y Joaqu¨ªn Calvo Sotelo. Jes¨²s Fern¨¢ndez Santos hab¨ªa sido presentado por Miguel Delibes, Carlos Bouso?o y Manuel Seco. Jos¨¦ Luis Castillo-Puche fue defendido por Gonzalo Torrente Ballester, Carmen Conde y Emilio Lorenzo.

Cuesti¨®n de n¨²meros

Miguel Delibes, que defend¨ªa a Fern¨¢ndez Santos, destac¨® la dificultad de que uno de los propuestos alcance mayor¨ªa suficiente cuando son tres personas presentadas, "ya que cada uno se aferra a su candidato, y si realmente ninguno queda descolgado en las dos primeras votaciones, no se le abandona en la ¨²ltima".Por su parte, Buero Vallejo, se?al¨® a Efe que "esp¨ªritu de concordia siempre ha habido y hay. Es un problema mec¨¢nico. Si s¨®lo se presenta una persona es muy f¨¢cil que salga, si son dos es relativamente f¨¢cil, pero si son tres es muy dificil, porque sin que se vulnere la concordia, cada uno tiene sus preferencias".

Sillones desiertos

Esta es la tercera vez -desde que el poeta D¨¢maso Alonso dej¨® la direcci¨®n de la Academia- que se produce una votaci¨®n nula, al proponerse tres candidatos que dividen las opiniones de los acad¨¦micos. Concretamente, el a?o pasado esta situaci¨®n se repeti¨® por dos veces. En marzo de 1983, los acad¨¦micos tampoco eligieron por mayor¨ªa a uno de los tres candidatos que se hab¨ªan presentado para cubrir el sill¨®n que hab¨ªa quedado vacante tras la muerte de Eugenio Montes. En aquella ocasi¨®n, ni Francisco L¨®pez Estrada, ni Jos¨¦ Luis Varela, ni Juan Rof Carballo, obtuvieron, seg¨²n los estatutos, el reconocimiento suficiente de la Academia.Aunque este caso de falta de acuerdo ten¨ªa alg¨²n antecedente ' fuentes cercanas a la Academia calificaron como "muy raro y significativo".

Meses m¨¢s tarde -junio de 1983- los acad¨¦micos volver¨ªan a protagonizar una situaci¨®n semejante. Se trataba de cubrir la vacante del sill¨®n Z may¨²scula. Los candidatos eran los escritores Juan Benet, Jes¨²s Fern¨¢ndez Santos y Jos¨¦ Luis Castillo-Puche y ninguno de ellos alcanz¨® los votos necesarios -la mayor¨ªa absoluta en la tercera votaci¨®n- para ser elegidos. Ayer, Fern¨¢ndez Santos y Castillo Puche volver¨ªan a protagonizar sin quererlo, la misma situaci¨®n.

La intransigencia entre los acad¨¦micos o la falta de concordia en el seno de la instituci¨®n han sido negadas por los miembros de la Academia. "No existen", dijo Zamora Vicente, intransigencias ni oposiciones hist¨®ricas".