Caritoux o Alberto Fern¨¢ndez, ¨²nica duda para la adjudicacion del triunfo absoluto ma?ana en Madrid
![Luis G¨®mez](https://imagenes.elpais.com/resizer/v2/https%3A%2F%2Fs3.amazonaws.com%2Farc-authors%2Fprisa%2F2ce46456-ac54-4700-96db-0b8f394a4fda.jpg?auth=77002eb2305650451646ff522b8a51b014f7c806758a28329fafa3c3944a40f6&width=100&height=100&smart=true)
LUIS G?MEZ ENVIADO ESPECIAL, Recio era el tercer espa?ol que ganaba una etapa de la Vuelta a Espa?a cuando lleg¨® en solitario a la meta. Fue el premio que mereci¨® el equipo Kelme, el ¨²nico que atac¨® con fuerza en una etapa decepcionante que s¨®lo sirvi¨® para confirmar que tanto Delgado como Gorospe no llegar¨¢n de amarillo a Madrid. Todo queda pendiente de resoluci¨®n para la contrarreloj de hoy en Torrej¨®n, con un combate a 33 kil¨®metros entre Caritoux, franc¨¦s, y Alberto Fern¨¢ndez, espa?ol.
O Alberto Fern¨¢ndez, o Caritoux, esa es la cuesti¨®n que va a debatirse hoy en Torrej¨®n. Hoy muchos aficionados espa?oles apretar¨¢n su cron¨®metro cuando Alberto Fern¨¢ndez cruce la l¨ªnea de meta, esperar¨¢n dos minutos y, entonces, s¨®lo entonces, comenzar¨¢n a temblar porque habr¨¢ empezado una cuenta atr¨¢s que comienza en 37. Cada segundo ser¨¢ un metro que Alberto Fern¨¢ndez se acerque al podio para recoger el Jersei amarillo a ¨²ltima hora, que no es tarde sino la hora en punto para entrar en el palmar¨¦s de la Vuelta a Espa?a.Si la cuenta atr¨¢s no llega al cero, Caritoux imaginar¨¢ el domingo que la Castellana es un paseo madrile?o similar a los Campos El¨ªseos. Sean Kelly, un irland¨¦s, sentir¨¢ desde Par¨ªs el peque?o resquemor que supone sentir que algo puede empezar a moverse debajo de su cama. No ser¨¢ el amante de su mujer, sino su lugarteniente m¨¢s querido, convertido en candidato a robarle el aprecio de los aficionados galos. Cuando corra por carreteras francesas, todos querr¨¢n que Caritoux sea el jefe de filas, faltar¨ªa m¨¢s.
Pedro Delgado y Juli¨¢n Gorospe quedaron descartados. Para el primero, la jornada result¨® m¨¢s penosa porque corr¨ªa por carreteras que conoce. Al menos los ¨²ltimos 50 kil¨®metros fueron sembrados de pinchadas sobre asfalto, animando a Perico. Lo intent¨® en solitario tres o cuatro veces, pero le fallaron las fuerzas y el equipo. Gorospe se limit¨® a hacer bulto, empe?ado en fracasar cuando los pron¨®sticos le comienzan a ser favorables. La etapa, en l¨ªneas generales fue aburrida y decepcionante. Donde se prometieron roturas espectaculares, s¨®lo se registraron abandonos de ¨²ltima hora. La noticia estuvo m¨¢s en la cola del pelot¨®n que en la cabeza de carrera. Era m¨¢s interesante conocer que el Zor perd¨ªa muchos enteros por detr¨¢s, al retirarse ?lvaro Pino y Juan Fern¨¢ndez, que observar c¨®mo los favoritos buscaban el calor que ofrece marchar en pelot¨®n. Fue m¨¢s espectacular el desfallecimiento de Chozas que notar la tranquilidad con que esa informaci¨®n se descifraba en cabeza: ni un ataque digno de menci¨®n, ning¨²n salto notable. Luego abandon¨® Marino Le jarreta, decidido a no agravar su bronquitis a la vista de que nada glorioso le esperaba en Madrid.
Que durante 220 kil¨®metros, L¨®pez (Kelme) y Van Brabant mantuvieran la m¨¢s larga escapada de la Vuelta a Espa?a y llegaran a contar con 18 minutos de ventaja, no fue m¨¢s que una proeza consentida Hasta a un Mariano Bay¨®n, escaso de fuerzas y a punto de quedar des colgado, le permitieron que pasase destacado por su pueblo natal, Cu¨¦llar. Todo ¨¦l desarrollo de la etapa transcurri¨® seg¨²n c¨¢nones muy vistos en anteriores d¨ªas clave; fue la cuarta repetici¨®n. Como en Rassos de Peguera, como en los lagos de Covadonga, como en Santander, quienes ten¨ªan la responsabilidad de mantener la iniciativa esperaron al ¨²ltimo puerto y ayer, de tanto aguardar, la carrera result¨® incluso suave, porque el puerto de Cotos, con un piso reci¨¦n restaurado, no sirvi¨® para romper casi nada.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
?Tienes una suscripci¨®n de empresa? Accede aqu¨ª para contratar m¨¢s cuentas.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.