Alonso Puerta, "satisfecho, aunque sorprendido", por la soluci¨®n a su querella sobre contratas de limpieza
"Estoy relativamente satisfecho, aunque soprendido". Con estas palabras resume Alonso Puerta, pol¨ªtico expulsado del PSOE en octubre de 1981 y despose¨ªdo de sus cargos de concejal y teniente de alcalde del Ayuntamiento de Madrid, sus impresiones sobre los dos autos recientes de las audiencias Provincial y Territorial de Madrid (ver EL PA?S del 12 de mayo pasado). Uno de los autos judiciales declara sobreseida la querella por presuntos sobornos y cohechos en ayuntamientos de Madrid dirigidos por el PSOE y el otro establece el derecho de Alonso Puerta a cobrar los salarios que dej¨® de percibir en el Ayuntamiento de Madrid desde que fue ilegalmente despose¨ªdo de su cargo.Puerta se?al¨® que el auto de la Audiencia Provincial reconoce que existi¨® materia delictiva en los hechos objeto de la querella contra Pedro Galindo, ya fallecido, y Vicente Torres, por la presunta participaci¨®n de ambos en cohechos e intentos de soborno para conseguir venta de materiales a ayuntamientos controlados por el partido socialista y contratas de limpieza. "Lo que me resulta m¨¢s soprendente", declar¨® el pol¨ªtico expulsado del PSOE, "es que el sobreseimiento se basa, por lo que respecta a Vicente Torres, en la inexistencia de otro testimonio contra su persona, seg¨²n el auto judicial, distinto al de Carlos Franco Arandilla. Creo que esto no es exacto", a?adi¨® Puerta, "porque ante el juez competente prestaron declaraci¨®n cinco concejales, que ratificaron mis acusaciones sobre los ofrecimientos econ¨®micos de Torres al PSOE si se le conced¨ªa a la empresa Sellberg la contrata de limpieza de la zona norte de Madrid".
Alonso Puerta se muestra sorprendido, tambi¨¦n, por el hecho de que el auto considere de insuficiente importancia para el desarrollo del procedimiento judicial el testimonio de Franco Arandilla, que desempe?aba la direcci¨®n de Sellberg, cuando Torres realiz¨®, presuntamente, los intentos de soborno. "Tanto el juez como yo disponemos de la declaraci¨®n de Franco Arandilla, que relata c¨®mo tuvo conocimiento de los ofrecimientos econ¨®micos ilegales de Torres al PSOE", afirma Puerta. "Hay que tener en cuenta, adem¨¢s, que este hombre fue cesado, seg¨²n afirma ¨¦l mismo, precisamente por su negativa a encubrir los intentos de cohecho de Vicente Torres y por no aceptar que la empresa abonara 1.200.000 pesetas al abogado que defendi¨® a Torres frente a mi querella". Estas circunstancias, en opini¨®n de Alonso Puerta, no restan valor al testimonio de Franco Arandilla "sino que, m¨¢s bien, le otorgan una considerable importancia porque este hombre ten¨ªa que conocer al dedillo las interioridades de Sellberg, para la que trabajaba Vicente Torres".
En cuanto al segundo auto, el de la Audiencia Territorial, que desarrolla una sentencia anterior confirmada por el Tribunal Supremo acerca de la ilegalidad y nulidad de pleno derecho del cese de Puerta como concejal y teniente de alcalde, el pol¨ªtico manifest¨® que est¨¢ muy satisfecho porque la autoridad judicial ha sido coherente.
El antiguo teniente de alcalde asegura que "con este auto queda bien sentado que la decisi¨®n judicial que declara la ilegalidad de mi cese no es una cuesti¨®n de forma, como pretendi¨® hacer creer en cierto momento alg¨²n representante del PSOE, sino una sentencia definitiva con plenos efectos jur¨ªdicos, morales y materiales".
Puerta, que no ha abandonado su militancia pol¨ªtica de izquierda, y es dirigente del Partido de Acci¨®n Socialista (PASOC), afirm¨® que en caso de conseguir el cobro efectivo de los salarios que le debe el Ayuntamiento dedicar¨¢ el dinero a costear los gastos del proceso judicial para hacer valer sus derechos y a esclarecer los hechos que provocaron su cese ilegal.
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